La jornada del 10 de junio dejó al menos tres muertos y decenas de heridos en una serie de atentados atribuidos a las disidencias de las Farc en el departamento del Cauca. El gobernador Octavio Guzmán lanzó una advertencia categórica a la ciudadanía: “Eviten salir esta semana en la noche”, en referencia a la posibilidad de nuevos ataques durante la conmemoración de la muerte de alias Mayimbú, un excabecilla del grupo armado.
Desde la madrugada comenzaron a reportarse hechos violentos. El primer ataque se registró en El Bordo, Patía, con la activación de un carro bomba que provocó daños materiales. Minutos después, un segundo vehículo explotó en el parque principal de Corinto, cerca de la estación de Policía. Aunque estos atentados no causaron víctimas fatales, sí marcaron el inicio de una jornada de violencia en cadena.
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Con el paso de las horas, nuevos ataques se registraron en municipios como Buenos Aires, Morales, Timbiquí y Suárez. El punto más grave ocurrió en el peaje de Villa Rica, sobre la vía Panamericana, donde un artefacto explosivo oculto en un bus de servicio intermunicipal cobró la vida de un agente de tránsito.
Autoridades del Valle enviaron carta al Gobierno Nacional
Ante la situación, las principales autoridades del Valle del Cauca encabezadas por la gobernadora Dilian Francisca Toro y los alcaldes de Cali, Palmira, Buenaventura y Jamundí enviaron una carta al presidente Gustavo Petro solicitando de manera urgente un consejo de seguridad durante su visita a Cali este miércoles 11 de junio. En el documento exigen la presencia de la cúpula militar y de policía, además de una estrategia integral frente al avance de los grupos armados ilegales.
En Cali, donde también se presentaron explosiones y disturbios en días anteriores, el Consejo de Seguridad extraordinario concluyó con medidas concretas: ley seca desde las 9:00 p.m. del martes hasta la medianoche del miércoles, y restricción en el horario de bares, restaurantes y discotecas.
“Estamos frente a una amenaza real. Estos no son hechos aislados. Se trata de una ofensiva articulada de estructuras terroristas que quieren infundir miedo y desestabilizar la región”, afirmó el gobernador Guzmán. Las autoridades han activado Puestos de Mando Unificado (PMU) para monitorear los acontecimientos y tomar decisiones preventivas.
La situación sigue siendo crítica y las autoridades insisten en el llamado a la precaución, a evitar desplazamientos nocturnos y a mantenerse informados a través de canales oficiales. Mientras tanto, la población del suroccidente del país enfrenta con incertidumbre los próximos días, a la espera de respuestas efectivas del Gobierno Nacional.