...

Salida de Miguel Uribe redefine la pelea por la candidatura presidencial del Centro Democrático

El partido confirmó la salida del precandidato en medio de aparentes tensiones internas.

El Centro Democrático anunció que Miguel Uribe Londoño ya no seguirá en la carrera por el aval presidencial, en medio de tensiones internas que se vienen acumulando desde hace meses. La decisión se hiso publica por medio de un comunicado, porque hasta hace poco el aspirante figuraba entre los primeros lugares en intención de voto dentro de esa colectividad.

La noticia se presentó luego de que se informara un supuesto apoyo de Uribe Londoño a Abelardo de la Espriella, uno de los precandidatos más fuertes del sector de derecha. Según el partido, el abogado le habría contado al expresidente Álvaro Uribe que recibió una llamada donde el ahora expulsado le expresaba su renuncia a la aspiración y su intención de apoyarlo.

Uribe Londoño lo negó de inmediato. Publicó un mensaje en redes donde aseguró que no renunciaba y que nadie podía hablar en su nombre. Ese choque dejó expuesto un conflicto que, al parecer, ya venía creciendo dentro del partido.

Tensiones que venían de atrás

La precandidatura de Uribe Londoño nació tras el asesinato de su hijo, el senador Miguel Uribe Turbay. Fue visto como una opción para mantener la representación política de la familia dentro del Centro Democrático. Sin embargo, desde el inicio enfrentó resistencia dentro de la colectividad.

Los señalamientos comenzaron con choques por la metodología para elegir al aspirante presidencial. Hubo discusiones con la firma encuestadora AtlasIntel y reclamos sobre el proceso. Esos desacuerdos llevaron al partido a suspender el mecanismo que estaba en marcha y a buscar una alternativa.

Lea también: Iván Cepeda lidera la intención de voto presidencial con 31,9% según encuesta Invamer

Mientras avanzaba esa discusión, la tensión crecía. Hubo cruces de cartas y malestar en las directivas. Uribe Londoño consideraba que no existían garantías suficientes para un proceso transparente. Otros aspirantes y dirigentes cuestionaban sus reclamos y su forma de actuar.

La crisis aumentó cuando se decidió cambiar la encuestadora y contratar a una firma chilena para un nuevo estudio. Uribe Londoño protestó nuevamente porque no le consultaron. Y esa molestia terminó en su salida del proceso.

La versión del partido vs. la defensa del expulsado

En su comunicado del 1 de diciembre, el Centro Democrático relató una serie de episodios que, según el partido, demuestran la intención de Uribe Londoño de abandonar su campaña. Mencionaron mensajes enviados al expresidente Uribe, la cancelación de su participación en un foro y una solicitud de reunión que nunca se concretó.

También señalaron la comunicación entre De La Espriella y Álvaro Uribe, donde se habría informado la decisión de renunciar. Con ese relato, el director del partido ratificó que la contienda seguirá solo con las senadoras María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Paola Holguín.

Uribe Londoño negó haber renunciado y dijo que es inaceptable que lo excluyan por versiones de terceros o por una interpretación equivocada de sus conversaciones. Además, pidió que el partido rectificara la información.

El exprecandidato también ha protagonizado cruzados públicos con el presidente Gustavo Petro. El más reciente ocurrió por la discusión sobre el espacio aéreo venezolano. Uribe Londoño criticó la postura del mandatario y lo acusó de defender a Nicolás Maduro.

Petro respondió recordándole que antes lo apoyó para llegar a la Alcaldía de Bogotá. Ese intercambio mostró cómo la confrontación política también influye en el ambiente dentro del uribismo.

¿Qué viene para el uribismo?

La salida de uno de los aspirantes con mayor reconocimiento deja al partido en un escenario complejo. La crisis interna ocurre cuando los otros sectores políticos ya avanzan en la elección de sus candidatos.

Le puede interesar: Petro invita a Trump a Colombia: “destruimos fábricas de cocaína juntos”

Ahora, la disputa quedaría entre tres senadoras que representan distintas líneas dentro del partido. Mientras tanto, Uribe Londoño insiste en que seguirá firme, aunque el partido ya no lo considere dentro del proceso.

El tiempo avanza, en marzo está prevista la consulta que definirá al candidato de la derecha para las elecciones presidenciales de 2026, por lo que este nuevo choque genera expectativa y preocupación para los seguidores de los precandidatos involucrados.