Tras varios meses de incertidumbre, largas filas y protestas por parte de miles de usuarios, la Nueva EPS comienza a mostrar avances en la normalización de la entrega de medicamentos en Cali y otros municipios del Valle del Cauca. La situación, que se tornó crítica a inicios de febrero, cuando Audifarma dejó de operar como gestor farmacéutico, afectó a más de 300.000 afiliados en la ciudad, muchos de ellos con tratamientos de enfermedades crónicas que no podían esperar.
Durante el periodo comprendido entre el 26 de marzo y el 10 de abril, se reportó la entrega de 158.810 medicamentos en el departamento. De esa cifra, 122.720 fueron entregados específicamente en Cali y en municipios cercanos, lo que representa un avance importante tras la interrupción del servicio que dejó a muchas personas sin acceso a sus fórmulas médicas.
El nuevo operador encargado de la entrega en Cali es Disfarma, que ha logrado abrir nuevos puntos de atención en la ciudad y en localidades vecinas. Entre los lugares con mayor número de entregas se encuentran el punto de Cali Santiago Plaza, con 32.905 medicamentos entregados; Cali Américas, con 29.787; y la sede de Tequendama Subsede, con 23.015. Estos tres puntos concentran más de la mitad de los medicamentos distribuidos en este periodo.
Otros puntos como Cali Ingenio (7.642 entregas), Buga (5.914), Pradera (3.016), Yumbo (2.654) y Palmira 1 y 2 (más de 11.000 entre ambos), también hacen parte del esfuerzo por ampliar la cobertura y mejorar el acceso. Incluso en zonas de difícil acceso como Buenaventura, ya se están viendo resultados con más de 1.000 medicamentos entregados.
Cabe recordar que, durante la crisis, se registraron denuncias por falta de medicamentos, colas que empezaban desde las 4:00 a.m. y personas con enfermedades delicadas esperando días enteros por sus fórmulas. Ante esa situación, la Nueva EPS prometió una reestructuración de su red de entrega y mayor presencia territorial.
Ahora, además de los nuevos puntos físicos, se ha implementado un sistema de turnos más organizado, horarios extendidos (hasta las 11:00 p.m. en algunos casos) y un servicio de entrega a domicilio que busca priorizar a los pacientes con movilidad reducida o condiciones críticas.
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Aunque los usuarios reconocen que la situación ha mejorado, muchos siguen exigiendo estabilidad en el servicio y alertan que cualquier cambio en los operadores no puede volver a generar un caos como el ocurrido este año.
La Nueva EPS, por su parte, ha afirmado que seguirá monitoreando el desempeño del nuevo operador y ampliará los puntos de atención si es necesario para garantizar que ningún afiliado se quede sin medicamentos.
