La noche del 30 de noviembre al 1 de diciembre marcó el inicio oficial de la temporada navideña en Cali con la tradicional Alborada, una celebración caracterizada por el uso excesivo de pólvora. Durante aproximadamente una hora, los cielos se iluminaron con fuegos artificiales, mientras que los sonidos estruendosos llenaron las calles. Sin embargo, lo que para muchos es motivo de alegría y tradición, para los animales representa una experiencia traumática y, en ocasiones, letal.
El agudo sentido de la audición de los animales los hace particularmente vulnerables al impacto de la pólvora. Los ruidos fuertes pueden desencadenar reacciones como taquicardia, desorientación, estrés extremo, intentos de huida y, en casos más graves, infartos o la muerte. Esta problemática no solo afecta a las mascotas como perros y gatos, sino también a la fauna silvestre que, a menudo, queda fuera de los reportes oficiales.
Según reportó Conexión Animal, organización defensora de los animales, hubo un alarmante incremento en los casos de animales afectados en comparación con el año anterior. En esta ocasión, 62 animales sufrieron consecuencias por la pólvora. Esto representa un aumento del 72,22 % frente a los 36 casos registrados en 2023.
Entre los reportes recibidos, 41 animales fueron hallados desorientados, 18 se extraviaron de sus hogares, tres sufrieron episodios de estrés severo y un perro resultó atropellado tras intentar huir del ruido. Hasta ahora, solo dos de los animales extraviados han logrado regresar con sus dueños. Cabe resaltar que las comunas 6, 8, 19, 7 y 2 fueron donde hubo mayor reporte de casos.
“Pedimos a las familias caleñas y de todo el país que sean conscientes del daño que causan por unos minutos de diversión. ¡No más pólvora!”, expresó Conexión Animal en un llamado a la ciudadanía para priorizar la empatía y el bienestar animal.
¿Es hora de replantear la tradición?
Aunque la Alborada es una tradición profundamente arraigada en la cultura colombiana, sus consecuencias negativas para los animales y el medio ambiente han generado un debate cada vez más amplio sobre su continuidad. Activistas, organizaciones y ciudadanos conscientes han alzado su voz para exigir medidas más estrictas y promover alternativas de celebración más respetuosas con la vida.
Lea también: Movilidad en Cali para fin de año: Nuevas medidas para el tráfico y reducir accidentes
El llamado a la reflexión por parte de estas entidades es para invitar a la sociedad a reconsiderar cómo celebramos nuestras festividades, para garantizar que nuestras tradiciones no se conviertan en un motivo de sufrimiento para quienes no tienen voz.