Metro Cali salió al paso de las declaraciones de la concejal de Cali, Ana Erazo, quien había señalado públicamente que el empréstito de $3.5 billones aprobado por el Concejo Distrital, destinado al financiamiento de obras dentro del Plan de Desarrollo “Cali, Capital Pacífica de Colombia”, se utilizaría para pagar la deuda de Blanco y Negro Masivo, operador del MIO, y para financiar la adquisición de buses eléctricos bajo condiciones favorables para el concesionario.
En sus declaraciones, la concejal Erazo advirtió que el Otrosí No. 13, que está en discusión entre las partes, permitiría que Metrocali asumiera una deuda de $148 mil millones que Blanco y Negro Masivo tiene con Bancolombia, y además, que dicho acuerdo le otorgaría al operador la facultad de elegir la flota de buses eléctricos que se adquiriría con parte de esos fondos.
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Metro Cali desvirtúa desinformación infundada por la concejal
Por medio de un comunicado a la opinión pública, Metrocali desmintió tajantemente estas afirmaciones. En primer lugar, aclaró que el dinero del empréstito aprobado por el Concejo Distrital no se utilizará para cancelar ninguna deuda de Blanco y Negro Masivo. La entidad explicó que el acuerdo conciliatorio con el concesionario, firmado en julio de 2024, permitió que Metrocali comprara la deuda de $148 mil millones con Bancolombia por un valor mucho menor de $35 mil millones, lo que resultó en un costo “a suma cero” para la ciudad, ya que, además, se redujo el valor de la remuneración de Blanco y Negro Masivo en un 13%. Este acuerdo fue aprobado tanto por la Procuraduría General de la Nación como por los tres árbitros del tribunal de arbitramento.
En cuanto a las acusaciones de que los nuevos buses eléctricos serían propiedad de un privado, Metrocali reafirmó que la flota eléctrica del MIO será 100% pública y de propiedad del Distrito de Cali. El dinero del empréstito será destinado exclusivamente a la compra de estos buses y a la adecuación de los patios para su carga. La entidad destacó que este proceso busca recuperar el control sobre la flota, un activo estratégico para la ciudad, evitando que ocurra lo mismo que sucedió con Unimetro, cuyo proceso de liquidación dejó los buses sin posibilidad de ser utilizados.
Metrocali también desmintió que el acuerdo en discusión permita que el concesionario elija los buses. Según la entidad, las especificaciones técnicas y los costos de los nuevos vehículos son decididos por Metrocali, quien actúa como ente gestor del sistema masivo de transporte y velará por la mejor opción para el MIO, siempre dentro del marco de las estipulaciones contractuales vigentes.
Finalmente, Metrocali rechazó las afirmaciones de que el acuerdo conciliatorio exoneraría a Blanco y Negro Masivo de renovar la flota. En cambio, la entidad explicó que el acuerdo busca reducir los costos operativos del sistema y garantizar un servicio de calidad para los caleños, al mismo tiempo que se asegura la renovación de la flota con buses eléctricos de propiedad pública.