En las últimas horas, la Secretaría de Movilidad de Cali presentó el borrador de un decreto que podría impactar directamente el bolsillo de los usuarios del sistema de transporte MÍO. La propuesta contempla un aumento en la tarifa, con el objetivo de mantener la sostenibilidad operativa del servicio y garantizar un acceso equitativo para todos los ciudadanos.
De acuerdo con el documento, la nueva tarifa del pasaje sería de 3.200 pesos. Lo que representa un incremento de 300 pesos frente al valor actual. Este ajuste comenzaría a regir desde el 16 de enero de 2025, siempre y cuando se apruebe la propuesta presentada. Según MetroCali, el aumento busca mantener la capacidad de pago de los usuarios, quienes podrán costear hasta 62 viajes mensuales con el auxilio de transporte vigente.
Por su parte, la Secretaría de Movilidad resaltó la importancia de la participación ciudadana en este proceso. Por ello, hasta el 12 de enero de 2025, los interesados podrán enviar sugerencias o comentarios al correo movilidad@cali.gov.co. Estas opiniones serán clave para ajustar y perfeccionar el decreto antes de su aprobación final.
“La participación ciudadana es fundamental para ajustar y enriquecer el contenido del decreto, que se espera sea firmado en breve”, señala el documento.
Escenarios evaluados y su impacto
Para determinar el incremento, MetroCali analizó varios escenarios posibles:
- Sin subsidios: La tarifa técnica sería de 5.601 pesos, imposibilitando que muchos usuarios puedan pagarla.
- Subsidio actual: Con los recursos proyectados, la tarifa se fijaría en 4.009 pesos, aunque aún afectaría el número de viajes que un usuario puede realizar.
- Incremento parcial del subsidio: Permitiría establecer la tarifa en 3.300 pesos, mejorando la capacidad de pago de los usuarios.
- Subsidio ampliado al máximo: Propuesta actual que fija la tarifa en 3.200 pesos, asegurando mayor accesibilidad para los caleños.
No obstante, a pesar del ajuste planteado, el sistema enfrenta un déficit financiero superior a 200.000 millones de pesos. Lo que representa para la entidad la necesidad de explorar nuevas fuentes de financiación para garantizar la operación del MÍO sin comprometer su accesibilidad para los caleños.
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Finalmente, el futuro de la tarifa del MÍO está en manos de la administración y de la ciudadanía, quienes tienen la oportunidad de contribuir el diseño final de esta propuesta. Mantener un balance entre sostenibilidad y accesibilidad será clave para asegurar la viabilidad del sistema.
