El Banco de Alimentos de Cali denunció que colaboradores de un comedor comunitario ubicado en el barrio Mariano Ramos, estaban vendiendo a través de redes sociales los alimentos destinados a la población vulnerable.
Según la entidad, desde hace varias semanas se venía realizando un seguimiento para verificar si en este comedor se estaban llevando a cabo actividades indebidas.
Gracias a esto, lograron confirmar que los alimentos entregados para atender a las personas más necesitadas eran vendidos a precios bajos.
Al parecer, los responsables además de usar redes sociales para ofrecer los productos, colocaban letreros promocionales afuera del comedor comunitario en Cali.
Además se pudo identificar que citaban a los compradores en una vivienda cercana, que también servía como punto de almacenamiento de los alimentos comercializados.
El director del Banco de Alimentos de Cali, Joaquín Gómez, señaló que estas acciones son una falta grave contra los acuerdos establecidos. Además podrían generar sanciones legales. Por esto, decidieron expulsar a esta organización del sistema de beneficiarios y suspenderle de manera definitiva el suministro de alimentos.
“Bien saben que, así como hay sanciones desde el Banco de Alimentos, también hay un parágrafo donde aparecen las sanciones penales. A veces los líderes no piensan en el daño tan grande que le pueden hacer a los niños o abuelos. Porque la honestidad y la transparencia deben caracterizar el trabajo de un excelente líder”, expresó Joaquín Alberto Gómez, director del Banco de Alimentos Cali.
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La entidad también informó que continuará investigando y supervisando a las organizaciones que manejan estos recursos. Así podrán asegurarse de que cumplan con los compromisos y que los alimentos lleguen a los ciudadanos que en realidad los necesitan.
