Este martes, los caleños vivieron una postal inolvidable cuando el cielo se transformó en un lienzo de colores cálidos. Hacia el final de la tarde, las nubes adoptaron tonos rojizos y anaranjados, creando un arrebol de gran intensidad que llenó de asombro a quienes se encontraban en las calles, parques y terrazas de la capital del Valle del Cauca.
Las cámaras de varios medios de comunicación y los celulares de cientos de personas se encargaron de registrar el fenómeno, que rápidamente se viralizó en redes sociales. Imágenes y videos del atardecer inundaron plataformas como Instagram y X (antes Twitter), donde los usuarios compartieron su admiración ante la belleza del espectáculo natural.
El fenómeno, conocido como “arrebol” o “candilazo”, ocurre cuando los rayos del sol atraviesan la atmósfera en un ángulo bajo, dispersando la luz de manera que predominan los tonos rojos y naranjas. La nubosidad de la tarde fue clave para que se diera este evento visual tan llamativo.
Arcoíris complemento el cielo majestuoso de la sucursal
Como si fuera poco, mientras la ciudad aún se maravillaba con los colores del atardecer, un doble arcoíris se hizo visible sobre la bóveda celeste, añadiendo más magia al paisaje urbano. Este tipo de arcoíris ocurre cuando la luz solar se refleja dos veces dentro de una gota de agua, invirtiendo el orden de los colores en el segundo arco y dándole una tonalidad más tenue.
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Aunque algunos refranes populares asocian los arreboles al pronóstico del clima, sugiriendo lluvias o días soleados según el caso, los expertos aclaran que no existe certeza científica sobre estas creencias. Lo cierto es que este martes, el cielo caleño ofreció un espectáculo que quedará en la memoria colectiva de la ciudad.
No es la primera vez que Cali regala postales dignas de admiración, pero eventos como el de hoy reafirman por qué es conocida como la “Sucursal del Cielo”.