Con el objetivo de optimizar la entrega de medicamentos a los usuarios de la Nueva EPS, Disfarma ha inaugurado un nuevo dispensario en el barrio Tequendama, al sur de Cali. Desde primeras horas de la mañana, decenas de personas han acudido a este punto en busca de sus tratamientos, evidenciando la alta demanda del servicio.
Desde hace varios meses, usuarios de la Nueva EPS han denunciado demoras en la entrega de medicamentos esenciales. Muchos de ellos han tenido que esperar semanas e incluso meses para recibir sus tratamientos, lo que ha puesto en riesgo su salud. Esta problemática se ha intensificado tras los cambios en la red de dispensación, lo que ha generado incertidumbre y molestia entre los pacientes.
La crisis ha sido particularmente grave para personas con enfermedades crónicas que dependen de una entrega constante de sus fármacos. Casos como el de Elsa Cortés, paciente con hipotiroidismo, reflejan la situación. “Desde noviembre no recibo mis medicinas. No me notificaron que ya podía reclamarlas, me enteré gracias a una amiga”, relató a El País. Otros pacientes han expresado que, ante la falta de soluciones, se han visto obligados a comprar los medicamentos por cuenta propia, asumiendo altos costos.
Un nuevo punto para descongestionar la entrega de fármacos
La apertura de esta sede responde a la necesidad de mejorar la atención a los afiliados y reducir las largas filas que se registraban en el dispensario de la Avenida Las Américas con Calle 19. El nuevo establecimiento, ubicado en la carrera 43 con calle 5B, operará de lunes a viernes de 7:00 a.m. a 5:00 p.m. y los sábados de 7:00 a.m. a 1:00 p.m.
Según informó la entidad, este centro cuenta con un equipo de 60 profesionales capacitados para atender aproximadamente 500 personas al día. Además, dispone de un espacio con capacidad para 75 personas dentro de sus instalaciones y ha habilitado sillas en el exterior para quienes deban esperar su turno.
Herney Roldán, quien llegó al punto a las 2:00 a.m., relató que no ha logrado reclamar los medicamentos de su madre en tres meses. “Ya llevo tres fórmulas vencidas”, lamentó. Un caso similar vive Víctor Vásquez, quien asegura que, tras el cambio de operador, le informaron que sus fórmulas previas ya no eran válidas, impidiéndole reclamar insumos médicos esenciales.
Expansión del servicio en Cali y el Valle
De acuerdo con Disfarma, hasta la fecha se han gestionado 16.620 fórmulas y entregado más de 41.500 medicamentos. La capacidad de atención ha aumentado significativamente, pasando de 600 a 2.000 usuarios diarios.
Para continuar con la mejora en la prestación del servicio, se prevé la apertura de otro centro de dispensación en Tequendama y uno adicional en el barrio Popular a partir del 1 de abril. Asimismo, el 15 de abril se habilitarán nuevos puntos de atención en municipios como Palmira, Buenaventura, Yumbo y Tuluá, lo que ampliará la cobertura en el Valle del Cauca.
A pesar de la apertura de nuevos dispensarios, persisten las preocupaciones sobre la eficiencia del servicio y la capacidad de respuesta de Disfarma ante la alta demanda. Pacientes y organizaciones han solicitado mayor claridad en la logística de entrega y una mejor comunicación para evitar que las personas sigan esperando sin información precisa sobre sus tratamientos.
Lea también: El hospital San Juan de Dios de Cali al borde del colapso por sobreocupación
Las autoridades locales han asegurado que seguirán supervisando la prestación del servicio y han hecho un llamado a Disfarma y la Nueva EPS para garantizar que los pacientes reciban sus medicamentos sin dilaciones. Por ahora, los usuarios esperan que estos nuevos puntos de dispensación representen una solución efectiva a la crisis que han vivido durante los últimos meses.
