Las lluvias del pasado lunes no solo afectaron la movilidad en Cali, sino que también pusieron en evidencia el deterioro de algunos buses del Sistema Integrado de Transporte Masivo (MIO). Varios pasajeros reportaron filtraciones de agua dentro de los buses del MIO, lo que generó incomodidad y cuestionamientos sobre el mantenimiento de la flota.
Varios ciudadanos que se movilizaban en el MIO durante la jornada de lluvias informaron que debieron cambiar de asiento para evitar mojarse, mientras que otros, sin opción, tuvieron que soportar el trayecto con agua goteando sobre ellos. En redes sociales, los pasajeros compartieron imágenes y videos que evidencian la problemática, exigiendo respuestas a las autoridades responsables del sistema.
Para muchos, esta situación refleja la falta de mantenimiento adecuado de los vehículos. “Si en Cali llueve, en los buses llueve más”, comentó un usuario en redes, expresando su molestia por el estado en el que se encuentran algunas unidades.
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Falta de mantenimiento genera filtraciones de agua en el MIO
El deterioro de algunos buses del MIO es un problema recurrente, según los pasajeros. Filtraciones, problemas mecánicos y fallas en el aire acondicionado son algunas de las quejas frecuentes. A pesar de los constantes llamados de la ciudadanía, la situación parece no mejorar.
Hasta el momento, Metrocali, entidad encargada de la operación del MIO, no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre estas denuncias. Sin embargo, los usuarios exigen respuestas y acciones concretas para garantizar un servicio de calidad.
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Un problema que afecta la confianza en el sistema
El MIO es uno de los principales medios de transporte en Cali, movilizando diariamente a miles de ciudadanos. Sin embargo, problemas como la filtración de agua, fallas mecánicas y retrasos han afectado la confianza de los usuarios. Algunos pasajeros han manifestado su preocupación ante la posibilidad de que el deterioro de los buses comprometa su seguridad.
A pesar de las inversiones anunciadas por las autoridades en modernización del sistema, los reclamos persisten. Solicitado una auditoría independiente para evaluar el estado real de los vehículos y garantizar un servicio digno para la comunidad. Mientras se esperan soluciones concretas, los usuarios del MIO continúan enfrentando los estragos del mal clima dentro de los buses, con la esperanza de que la situación no se convierta en una constante.
