En un operativo que tomó por sorpresa a comerciantes y transeúntes del centro de Cali, las autoridades lograron decomisar más de 2.600 botellas de licor ilegal, entre aguardiente, ron, whisky y tequila. La mercancía, nacional y extranjera, estaba almacenada en un centro comercial y se presume que buena parte de ella era adulterada. El golpe, según las autoridades, representa una de las mayores incautaciones del año en la capital del Valle.
Una de las bebidas más llamativas encontradas fue el “Guaraqueño”, un licor de origen foráneo que no está autorizado para distribuirse en el Valle del Cauca. Según la gerente de Rentas de la Gobernación, Martha Isabel Ramírez Salamanca, se trata de una bebida sin registro legal que pone en riesgo la salud de los consumidores y evade los tributos departamentales.
La operación, liderada por la Unidad de Rentas con apoyo de la Policía, no terminó sin sobresaltos. Cuando el camión que transportaba el licor decomisado se dirigía a las bodegas oficiales, fue atacado por desconocidos que lanzaron piedras contra el vehículo. El ataque causó daños en las ventanas y rompió varias botellas. Ante la agresión, fue necesario solicitar refuerzos y el helicóptero Halcón de la Policía sobrevoló la zona para evitar mayores disturbios.
Palmira también en la mira y el llamado a comprar legal
El operativo en Cali no es un caso aislado. En el municipio de Palmira, en días recientes, también fueron incautadas 1.801 unidades de licor adulterado y de contrabando, entre las que se encontraban botellas de aguardiente Blanco del Valle y otras marcas que aún están bajo revisión. El cargamento fue avaluado comercialmente en más de 26 millones de pesos.
Frente a este panorama, la Gobernación del Valle ha intensificado sus campañas de prevención y control. Recientemente fueron destruidas más de seis toneladas de licor y cigarrillos de contrabando, previamente incautados y procesados por la justicia. La meta, según indicaron las autoridades, es reducir el riesgo para la salud pública y frenar el comercio ilegal que golpea las finanzas del departamento.
La gerente de Rentas fue enfática al hacer un llamado a la ciudadanía para comprar únicamente en lugares autorizados y verificar la legalidad de los productos mediante la estampilla oficial de Rentas Departamentales. Para facilitar esta verificación, se puede usar la aplicación móvil SycTrace, que permite escanear el código QR de cada botella y comprobar si cumple con la normativa.
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Las autoridades aseguraron que los operativos seguirán reforzándose, especialmente durante los fines de semana y temporadas de alto consumo como ferias, fiestas o celebraciones masivas. El mensaje es claro: consumir licor adulterado no solo es un delito, sino también un peligro real para la vida.
