La emergencia hospitalaria en Cali vuelve a encender las alarmas. Este lunes, un paciente proveniente de Guapi, Cauca, fue trasladado en ambulancia aérea hasta la capital vallecaucana, pero al llegar a la Clínica Versalles institución a la que había sido remitido previamente no fue recibido debido al colapso operativo del centro médico.
El paciente fue transportado en condición delicada y, una vez aterrizó en el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, fue trasladado por vía terrestre hasta la clínica. Sin embargo, los paramédicos se encontraron con la negativa de ingreso. “Desafortunadamente llevamos una hora porque la clínica está colapsada, está demasiado llena”, relató uno de los profesionales que participó en el traslado.
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La Clínica Versalles confirmó la situación mediante un comunicado oficial en el que anunció que, debido a la alta demanda de pacientes, limitará su atención en urgencias únicamente a casos de emergencias vitales. “Nuestro servicio de urgencias adultos se ha visto afectado por la alta demanda de pacientes, lo cual ha generado una sobreocupación de nuestra capacidad instalada”, indicó el documento.
La situación no es aislada; según la Secretaría de Salud del Valle, varias instituciones médicas en la ciudad enfrentan una presión similar, con servicios desbordados y escasa disponibilidad de camas, especialmente en áreas críticas. Este panorama ha generado incertidumbre entre los ciudadanos, quienes temen no tener acceso oportuno a atención médica en caso de urgencia.
El caso del paciente rechazado en Versalles refleja una crisis estructural que afecta tanto a los centros médicos como a los usuarios, y pone en evidencia la necesidad de medidas urgentes para evitar que la salud colapse por completo en la capital del Valle del Cauca.
