El pasado miércoles 28 de mayo en horas de la noche, se vio alterada la tranquilidad en el sur de Cali, en el barrio Pampalinda, por un violento intento de robo que terminó en una persecución de película. Dos delincuentes irrumpieron en una vivienda y sustrajeron una caja fuerte con cerca de 53 millones de pesos en su interior. El operativo policial que frustró el asalto fue calificado por las autoridades como una muestra de reacción eficaz. Gracias al patrullaje del plan ‘Baliza’, uniformados detectaron a los sospechosos en el sector de Cristóbal Colón.
Al notar la presencia de la Policía, los delincuentes emprendieron la huida en un vehículo con placas falsas. Durante la persecución, abrieron fuego contra los uniformados, lo que provocó un intercambio de disparos en plena vía pública. Según las autoridades, los sujetos realizaron maniobras peligrosas que pusieron en riesgo la vida de transeúntes y conductores. Sin embargo, la acción de los agentes permitió cerrarles el paso y neutralizar el ataque.
Captura en flagrancia y recuperación del dinero
Ambos hombres fueron capturados en flagrancia, y durante el procedimiento se incautó un arma de fuego tipo revólver, cinco vainillas percutidas, un cartucho y el vehículo en el que huían. La Policía también recuperó la totalidad del dinero robado y la caja fuerte hurtada. A pesar del uso de armas, no se reportaron heridos entre civiles ni uniformados. La rápida actuación evitó una tragedia mayor en una zona concurrida de la ciudad.
En un intento desesperado por evitar su captura, los delincuentes ofrecieron una alta suma de dinero a los policías. Los uniformados rechazaron la propuesta y reafirmaron su compromiso con los principios institucionales. Uno de los capturados presenta antecedentes por hurto calificado y lesiones personales. Ambos fueron puestos a disposición de la Fiscalía y enfrentarán cargos por hurto agravado y porte ilegal de armas.
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Este hecho se suma a una preocupante estadística que inquieta a los caleños. Solo entre enero y agosto de 2024, se reportaron más de 1.000 robos a viviendas en el área metropolitana. El aumento de la violencia y los hurtos continúa siendo un desafío para las autoridades y una fuente de temor para los ciudadanos.