Lo que comenzó como un asalto común en un supermercado de Cali, terminó convirtiéndose en un caso internacional de búsqueda y captura. Esta semana, las autoridades españolas confirmaron la detención de un ciudadano colombiano señalado de haber asesinado a un agente de Policía en noviembre de 2024, en pleno ejercicio de sus funciones.
Según el reporte del Ministerio del Interior español, el hombre fue identificado por el alias de ‘Yeyeco’, y habría escapado del país tras el crimen, cruzando el Atlántico sin dejar rastro. El uniformado muerto lo habría sorprendido justo cuando salía del establecimiento robado, y fue en ese momento cuando el delincuente, en vez de huir, optó por dispararle varias veces, quitándole la vida.
La alerta internacional emitida por Interpol a finales de abril de 2025 permitió activar los protocolos de búsqueda en Europa. Las autoridades españolas, con apoyo de sus pares colombianos, comenzaron a rastrear los movimientos del sospechoso, quien logró ingresar a España por el aeropuerto de Madrid-Barajas, sin generar alertas inmediatas.
Aunque en un principio se desconocía su paradero exacto, los investigadores no tardaron en hallar pistas relevantes sobre su posible red de apoyo en ese país.
Así cayó alias ‘Yeyeco’
La clave para dar con su ubicación fue el rastreo de sus vínculos personales. Mediante el cruce constante de información entre ambos países, los agentes lograron identificar a familiares del fugitivo que residían en Figueres, una ciudad catalana cercana a la frontera con Francia. A partir de allí, el cerco se estrechó.
Durante varios días, los investigadores mantuvieron vigilancia discreta sobre el entorno cercano a esos familiares. Finalmente, el pasado viernes, los uniformados montaron un operativo en las inmediaciones de una vivienda donde ‘Yeyeco’ solía hospedarse. Fue allí donde, sin oponer resistencia, fue capturado mientras salía del domicilio.
Las autoridades no han revelado mayores detalles sobre el proceso judicial, pero sí confirmaron que el hombre enfrentará una solicitud de extradición y una pena estimada de 33 años de prisión por los delitos cometidos en Colombia.
Este caso se suma a una preocupante estadística en el Valle del Cauca. Solo en 2024, según cifras del diario El País de Cali, cinco policías fueron asesinados en distintos hechos violentos. Además, la capital del departamento registró un total de 946 homicidios durante ese mismo año, reflejando el deterioro de la seguridad urbana.
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En paralelo, regiones vecinas como Cauca y Jamundí vivieron en junio una ola de violencia, con atentados explosivos y emboscadas que dejaron al menos ocho muertos y más de 80 heridos, entre ellos varios funcionarios públicos.
