La comunidad estudiantil del colegio Eustaquio Palacios decidió iniciar un paro indefinido de clases como medida de protesta frente a lo que consideran una crisis que afecta directamente la calidad de su formación académica. Entre los principales reclamos se encuentra la reducción en la cobertura educativa, la fusión de grados, el inminente cierre de la jornada de la tarde, el mal estado de las instalaciones y las fallas constantes en la prestación del PAE, programa del que dependen miles de niños y jóvenes de la ciudad.
Los estudiantes aseguraron que esta manifestación tiene un carácter pacífico y que su objetivo no es interrumpir el proceso educativo, sino llamar la atención de las autoridades competentes para que se dé una respuesta inmediata a sus necesidades. “Necesitamos que nos escuchen, no queremos que cierren la jornada de la tarde porque muchas familias dependen de ella”, señaló uno de los voceros del movimiento estudiantil.
Llamado a la Secretaría de Educación de Cali
El llamado fue dirigido a la Secretaría de Educación de Cali, al Concejo Distrital, a la Alcaldía y al Ministerio de Educación, para que prioricen acciones concretas que permitan garantizar condiciones dignas de estudio.
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Por su parte, padres de familia y docentes respaldaron las demandas de los alumnos, advirtiendo que el cierre de horarios, la falta de alimentación adecuada y el deterioro de la infraestructura ponen en riesgo no solo la continuidad académica, sino también el bienestar integral de los estudiantes.
La protesta se suma a las múltiples alertas que en los últimos meses se han presentado en instituciones educativas oficiales de Cali, lo que evidencia la necesidad urgente de fortalecer la educación pública en la ciudad y de revisar a fondo la implementación del PAE.