Durante el fin de semana, en el barrio Poblado 2 del oriente de Cali, se volvió a registrar la práctica conocida como güireo y chacaleo. El evento ocurrió en la carrera 28D con calle 72W y tuvo la participación de menores de edad, lo que incrementa la alarma de autoridades y comunidad.
En sus inicios fue una dinámica similar a un baile juvenil, con encuentros espontáneos en barrios populares, hoy se ha transformado en escenarios de confrontación. Esta evolución preocupa a padres de familia y líderes comunitarios, quienes advierten que los enfrentamientos exponen a los participantes a riesgos cada vez mayores.

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De baile urbano a enfrentamiento riesgoso
De acuerdo con testimonios recogidos en la zona, el güireo y el chacaleo empezaron como expresiones culturales de jóvenes que buscaban espacios de esparcimiento y reconocimiento dentro de su comunidad. Sin embargo, tras el estallido social de 2021, estas prácticas adquirieron un carácter distinto.
Actualmente, algunos encuentros incluyen el uso de objetos contundentes y se convierten en riñas que pueden terminar en lesiones graves. Habitantes del sector afirman que en varias ocasiones han tenido que intervenir vecinos y padres para detener los altercados, mientras piden una acción más decidida por parte de la administración distrital.
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Autoridades y voces de alerta
La concejala Daniella Plaza reiteró la urgencia de atender este fenómeno que afecta a la juventud del oriente de Cali. En sus redes sociales advirtió que desde su llegada al Concejo ha insistido en que el güireo y el chacaleo se están tornando cada vez más peligrosos.
“¿Vamos a esperar a lamentar una vida para actuar con contundencia?”, cuestionó la cabildante, quien pidió mayor articulación entre autoridades locales para prevenir que estas dinámicas. La comunidad también ha solicitado espacios alternativos para los jóvenes, con actividades deportivas y culturales que disminuyan la incidencia de estas prácticas.