Para entender el futuro de la energía en Colombia, vale la pena indagar en el pasado de Hernando Cadena. Hace más de una década, el fundador de CyP Energía no miraba a las montañas, sino a las estrellas. Su obsesión por la era espacial y la producción de hidrógeno como combustible lo llevó a una encrucijada práctica: para producir hidrógeno rentable, necesitaba electricidad barata y abundante.
Fue así como, junto a su hijo Juan José Cadena, emprendió desde su empresa un viaje de ingeniería inversa que hoy, años después, culmina en uno de los hitos tecnológicos más prometedores del Valle del Cauca: el desarrollo de un generador eólico de alta eficiencia diseñado específicamente para la compleja orografía de los Andes.
Este desarrollo, liderado por CyP Energía, superó la falta de un ecosistema local robusto y de infraestructura adecuada, demostrando que la innovación de talla mundial también nace y prospera en los talleres de Cali.
El desafío de los Andes: donde los gigantes fallan
La matriz energética del mundo tiene un problema de diseño: los generadores eólicos convencionales —esas inmensas torres de tres aspas que dominan los paisajes de Europa o La Guajira— son inviables para el interior de Colombia. Sus aspas, que rozan los 100 metros de longitud, no pueden atravesar las sinuosas carreteras de montaña, ni instalarse en las crestas de la cordillera sin costos astronómicos.
“Nuestros prototipos están pensados y diseñados para conquistar ese territorio de los Andes que hoy tiene una mayor capacidad eólica, pero que es inaccesible para la tecnología actual”, explica Juan José Cadena, líder en CyP Energía.
La tesis de la empresa es disruptiva: no se necesita ir hasta la costa para encontrar viento. Sus mediciones en la Loma de los Vientos y en las zonas rurales de Yumbo arrojaron un hallazgo sorprendente: vientos constantes superiores a los 10 metros por segundo, con ráfagas de hasta 17 m/s. Una potencia comparable, e incluso superior en densidad, a la de La Guajira, pero ubicada estratégicamente en uno de los principales centros de consumo industrial del país.
Lea también: COP 30: sin acuerdo sobre petróleo, Colombia queda expuesta
Ingeniería “Made in Cali”: del túnel de viento a la patente
El camino no fue fácil. Al intentar validar su patente, el equipo de CyP Energía se estrelló con una realidad: en el Valle del Cauca no existía la infraestructura académica ni técnica para probar su teoría a esa escala. Lejos de rendirse, decidieron construirla.
La empresa fabricó uno de los túneles de viento funcionales más grandes de Colombia. Este hito les permitió no solo dialogar de tú a tú con la academia y físicos en congresos nacionales, sino validar que su diseño —que se aleja de la tradicional tri-pala— es más eficiente para capturar la fuerza del viento de montaña.
Hoy, están a punto de probar en Yumbo el generador eólico más grande jamás fabricado en suelo colombiano, un prototipo que promete cerrar la brecha energética de la región.
La soberanía energética del Valle
La innovación de CyP Energía llega en un momento crítico. Según datos revelados por la empresa, el Valle del Cauca consume aproximadamente 7 gigavatios/hora (GWh), pero produce menos de 3 GWh. La región depende peligrosamente de la energía que llega de otras partes.
“El Valle está llamado a fortalecerse y generar recursos a raíz de la transición energética”, asegura Cadena. La tecnología de CyP Energía plantea tres revoluciones simultáneas:
- Parques eólicos andinos: instalar granjas de energía en los filos de las montañas, justo al lado de ciudades como Cali, Bogotá o Medellín, eliminando las costosas pérdidas por transmisión de energía desde otras regiones.
- Generación distribuida (híbrida): para fábricas y zonas rurales, esta tecnología es el complemento perfecto de la energía solar. Cuando el sol se oculta (o llueve), el viento suele aumentar, garantizando energía 24/7 sin depender de baterías costosas.
- El “Moonshot” urbano: el siguiente gran salto de CyP Energía es adaptar esta tecnología para edificios multifamiliares. Si logran que un edificio produzca su propia energía con el viento que golpea su fachada, estarían cambiando el paradigma de la arquitectura sostenible a nivel global.
La base de una nueva soberanía energética
El proyecto de CyP Energía no solo cierra la brecha tecnológica en la matriz energética colombiana, sino que abre una nueva era para los Andes. Con la inminente prueba de Yumbo, Cali se consolida como el epicentro desde donde el ingenio local comienza a domar el viento de la Cordillera. Este desarrollo, que va más allá de la importación de tecnología, sienta las bases para una soberanía energética renovable, estable y fabricada localmente, proyectando el conocimiento del Valle del Cauca al resto del mundo.
Lea también: Ley reconocerá víctimas de cambio climático como desplazadas
