La crisis de seguridad en Cali se agudizó drásticamente al cerrar la segunda semana de diciembre. Este sábado 13 de diciembre, la ciudad alcanzó la cifra de 1.000 homicidios en lo corrido de 2025, superando ampliamente la meta establecida por la administración municipal de cerrar el año con menos de 900 casos.
Según el Observatorio de Seguridad, este registro representa un aumento del 13% en comparación con el mismo periodo de 2024, encendiendo las alarmas sobre la efectividad de las estrategias de control del crimen en la capital del Valle.
Perfil de la violencia y factores del conflicto
El homicidio que marcó el hito de los 1.000 casos ocurrió en el barrio Unión de Vivienda Popular, donde un hombre de 38 años fue atacado con arma de fuego. El caso, aún sin capturas, refleja las tendencias de una violencia que golpea desproporcionadamente a ciertos sectores.
Los datos del balance de 2025 revelan:
- Víctimas: la gran mayoría (916) fueron hombres, frente a 63 mujeres, concentrándose el ataque en hombres jóvenes entre los 18 y 35 años.
- Modalidad: el 82,5% de los asesinatos se cometieron con arma de fuego.
Desde la Secretaría de Seguridad Distrital, se atribuye la mayoría de los casos de homicidio a disputas por el control de rentas criminales, el microtráfico y la presencia de estructuras armadas ilegales en la periferia de la ciudad.
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Geografía y horarios críticos
El fenómeno delincuencial no es uniforme y se concentra en zonas específicas que históricamente han sido focos de conflicto social y territorial:
- Comunas más afectadas: la violencia se concentra en las comunas 15, 14, 18, 21 y 13, concentrando buena parte de los hechos de sangre.
- Días y horas: los días más violentos son tradicionalmente los domingos y lunes, mientras que los momentos más críticos se registran durante la noche y la madrugada.
Respuesta de la Alcaldía
La cifra de 1.000 homicidios reabre el debate sobre la estrategia de seguridad actual. Ante el fracaso de la meta anual, la Alcaldía de Cali ha reaccionado anunciando un incremento drástico en el presupuesto de seguridad para el año 2026, el cual pasará de $60 mil millones a cerca de $300 mil millones.
Este aumento presupuestal busca inyectar recursos en tecnología, inteligencia y pie de fuerza para contener la escalada de violencia, la cual presiona a la administración a una revisión profunda de sus tácticas de intervención.
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