La Autopista Suroriental volvió a convertirse en escenario de memoria y tradición con una nueva edición del Desfile del Carnaval del Cali Viejo, uno de los eventos más representativos de la Feria de Cali. La jornada reunió a miles de personas que llegaron para ver, escuchar y sentir una manifestación cultural que conecta el pasado con el presente de la ciudad.
Cerca de 22.500 personas se ubicaron en las graderías y en los puntos de observación habilitados a lo largo del trayecto. Desde temprano, el recorrido se llenó de música, danza y expresiones artísticas que evocan la identidad popular de Cali. El desfile avanzó entre comparsas, vestuarios tradicionales y símbolos que hacen parte del imaginario colectivo caleño, ante la mirada atenta de familias completas y visitantes.
Uno de los momentos más destacados fue la representación del Buziraco, figura simbólica que desciende desde Siloé a comienzos de diciembre y anuncia la llegada de la Feria de Cali. Su presencia volvió a marcar el inicio de las celebraciones, como ha ocurrido durante años en la tradición popular.
En total, más de 2.500 artistas participaron en el desfile. En escena estuvieron 33 comparsas que recibieron estímulo económico y 10 comparsas invitadas, además de agrupaciones provenientes de otras regiones del país. Delegaciones de Huila, Pasto y Antioquia se sumaron al recorrido, aportando diversidad cultural y nuevas expresiones.
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El componente artístico representó costumbres, personajes y escenas cotidianas que forman parte de la historia caleña. Cada comparsa construyó un relato propio, desde los barrios y territorios, con énfasis en el trabajo comunitario y los procesos culturales.
Voces desde el territorio
Para Edison Valenzuela, rey del Carnaval del Cali Viejo, el desfile representa una responsabilidad con la ciudad. Señaló que su papel está ligado a la transmisión de saberes y a procesos sociales desarrollados durante más de dos décadas en Siloé, los cuales hoy se muestran en un escenario masivo.
Isabela Cueno, participante, señaló que la energía y la armonía que se viven durante el recorrido no se repiten en otros espacios. Wendy Murillo, por su parte, destacó la presencia de elementos naturales, como aves y colores, que representan la biodiversidad de Cali.
