La percepción de seguridad y el costo de la festividad se han tomado el debate digital en las últimas horas. A través de un sondeo realizado en nuestras plataformas de redes sociales, consultamos a la ciudadanía: “¿Ha sido víctima de hurto durante la Feria de Cali?”, obteniendo resultados que reflejan tanto la realidad del orden público como un profundo descontento social hacia la administración y la organización del evento.
Los resultados del sondeo
La consulta, que generó una alta participación en X (antes Twitter) e Instagram, arrojó las siguientes cifras:
- En X.com: el 18 % de los participantes respondió afirmativamente haber sido víctima de hurto. Por su parte, un 55 % indicó que no ha sido robado, mientras que un 27 % manifestó que, aunque no ha sido víctima directa, conoce casos cercanos de inseguridad durante la feria.

- En Instagram: la tendencia se mantuvo similar, con un 24 % (97 votos) que confirmó haber sido hurtado, un 56 % (226 votos) que no ha tenido incidentes, y un 20 % (83 votos) que reporta conocer casos de terceros.

El “robo” simbólico: la queja recurrente
Más allá del hurto físico de pertenencias, la sección de comentarios se convirtió en un espacio de catarsis donde los caleños expresaron su inconformidad con los precios y la supuesta privatización de la feria. Para muchos ciudadanos, el término “hurto” trascendió hacia el costo de las boletas y la logística del evento.
Entre los comentarios destacados por la comunidad, se encuentran visiones opuestas sobre la situación actual:
Claudia Calderón: “No, yo creo que donde uno vaya tiene que estar muy pendiente y no dar papaya y más donde hay aglomeraciones”.
Henry Rodríguez: “Ayer una muchacha y un muchacho víctimas, afuera en el Bulevar donde está la arepería; se hace mucho tumulto y ahí es donde roban celulares y otros objetos, tener mucho cuidado con sus pertenencias”.
Por otro lado, usuarios como Niko Kstro señalaron: “Sí me robaron, y lo peor es que la misma administración con el costo de las boletas para las graderías”, una opinión que resonó en múltiples perfiles que critican la elitización de lo que antes se consideraba una fiesta popular.
Seguridad y prevención
A pesar de las críticas hacia la administración del alcalde Alejandro Eder, algunos ciudadanos rescataron una leve mejoría en el control de ciertas zonas, atribuyéndolo más a la precaución ciudadana que al despliegue oficial. Mensajes como el de Martha Lucía G. López, quien afirmó: “Hay seguridad, eso sí, no dar papaya”, o Rodas C. Mario, quien calificó esta edición como “la feria más segura de los últimos 40 años”, muestran que la opinión pública está dividida frente a los resultados de los operativos de seguridad vigentes hasta el 30 de diciembre.
Lea también: Programación oficial: cierre de la Feria de Cali 2025