Al llegar al búnker de la Fiscalía este martes 13 de agosto, la exfuncionaria Sandra Ortiz, quien se acercó a la entidad para su interrogatorio tras ser salpicada en escándalo de corrupción de la UNGRD. Fue recibida por un grupo de periodistas y medios de comunicación que esperaban su llegada. Visiblemente afectada, declaró que tanto su vida como la de sus dos hijas están en serio peligro debido a la “persecución mediática” que ha enfrentado desde que se vinculó su nombre con el caso.
La exfuncionaria que fue mencionada por Sneyder Pinilla, uno de los principales implicados y acusados en el caso, dijo a los medios de comunicación ser inocente y que es la difusión de los presuntos lo que hace que su imágen y nombre queden mal ante el país.
“Hablo de algunos medios de comunicación, de ese perfilamiento a esos pocos medios que me han perseguido y por todas las noticias de los últimos dias hoy mi vida esta en peligro y la de mis dos hijas”, expresó la exfuncionaria Sandra Ortíz.
Pinilla lanzó fuertes acusaciones sobre la exfuncionaria
De acuerdo con el testimonio de Sneyder Pinilla dado a medios nacionales, Ortiz habría sobornado con una suma considerable al presidente del Congreso, Iván Name, en relación con el acuerdo de los vehículos que iban a abastecer de agua a indígenas wayúu del desértico departamento del norte del país.
A pesar de la seriedad de las acusaciones, el abogado de Ortiz, Pedro Aguilar, rechazó la posibilidad de alcanzar un acuerdo de colaboración con la justicia, argumentando que las pruebas en su contra no son definitivas. También señaló que están preparando una defensa robusta para demostrar la inocencia de su cliente.
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El caso sigue siendo un tema candente en la agenda nacional, especialmente debido a las denuncias de Ortiz sobre amenazas a su vida y a la de sus familiares. La Fiscalía sigue adelante con la investigación, mientras que la exconsejera sostiene que su involucramiento en el caso es el resultado de “acusaciones infundadas” destinadas a desacreditarla.
