Iris Marín, quien este viernes 30 de agosto se convirtió en la primera mujer en ocupar el cargo de Defensora del Pueblo en Colombia. Arremetió contra el presidente Gustavo Petro debido a sus recientes comentarios hacia las mujeres periodistas. Presuntamente el mandatario estatal las llamó “muñecas de la mafia”. En su declaración, Marín subrayó que las mujeres no son “muñecas ni instrumentos de nadie”. Rechazó lo que considera insultos y ataques discriminatorios por parte del mandatario.
Tras escuchar estas declaraciones, Marín respondió con firmeza a través de su cuenta en ‘X’ condenando el uso de un lenguaje que considera discriminatorio y exigiendo respeto hacia las mujeres. “No hay espacio para estigmatizaciones o agravios frente a las periodistas. Nada lo justifica. No somos muñecas ni instrumentos de nadie. Debatamos las diferencias, no violentemos a las mujeres”, escribió Marín.
Los comentarios de Petro se dieron mientras él defendía a los jóvenes que participaron en el estallido social y criticaba a ciertos sectores de la prensa. Acusó a las periodistas de ser portavoces de intereses que buscan criminalizar el derecho a la protesta, afirmando que habían creado una narrativa que promovía la idea de terrorismo en las manifestaciones.
“Las periodistas del poder, las muñecas de la mafia, construyeron la tesis del terrorismo en la protesta y la criminalización del derecho genuino a protestar”, expresó el mandatario colombiano.
No obstante, en el acto de posesión en Nuquí, Chocó, Marín hizo hincapié en su compromiso con la igualdad de género y la participación de las mujeres en todos los niveles de decisión pública y privada. Subrayó que, durante 33 años, la Defensoría del Pueblo había estado dirigida solo por hombres y que su llegada representa un avance hacia la equidad. “Hoy es un día importante no solo para mí, sino para todas las defensoras de derechos humanos en Colombia”, afirmó.
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Su intención es trabajar con las regiones más afectadas por la violencia
Marín también destacó su intención de trabajar en favor de las regiones más afectadas por la violencia. Como el Chocó, y aseguró que su administración mantendrá la independencia de la Defensoría del Pueblo. “La Defensoría del Pueblo tiene y seguirá teniendo muchos aliados, muchas aliadas de todo el país, pero no le pertenecerá a nadie en particular. Repito un mensaje que les pido no olvidar: confíen en la autonomía de las mujeres“, concluyó, reafirmando su compromiso con los derechos humanos y su lealtad a la Constitución.