El Gobierno de Colombia, a través de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), ha declarado un desastre nacional y asignado $1.7 billones para enfrentar las consecuencias de las inundaciones que afectan a varias regiones del país. La inversión inicial está dirigida a atender las emergencias más urgentes, como la reubicación de poblaciones en zonas de alto riesgo, la distribución de alimentos, la atención médica y la rehabilitación de infraestructuras esenciales.
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Carlos Carrillo, director de la UNGRD, lideró una reunión clave con el gabinete ministerial, donde se definieron las prioridades de acción ante la crisis. Las regiones más afectadas, como el Chocó, La Guajira y Bogotá, recibirán los recursos necesarios para mitigar los efectos de las lluvias y mejorar las condiciones de vida de los damnificados.
Entrega de Kits de emergencia como acción inmediata
Entre las acciones inmediatas que se llevarán a cabo se encuentran la entrega de kits de emergencia que incluyen alimentos no perecederos, productos de higiene y artículos básicos de supervivencia, así como el financiamiento de proyectos de maquinaria para rehabilitar vías y obras de infraestructura dañadas por el desastre. La UNGRD también destinará recursos para la atención sanitaria, con el objetivo de adecuar 145 sedes educativas y varios puestos de salud.
A nivel local, el Gobierno ha dispuesto subsidios de arrendamiento para las familias afectadas y la instalación de alojamientos temporales para aquellos que han perdido sus hogares. Además, se realizará un esfuerzo coordinado entre varias entidades, como el Ministerio de Defensa, el de Transporte, y Prosperidad Social, para garantizar una respuesta rápida y efectiva.
El presidente Petro destacó la importancia de esta inversión como parte de un enfoque integral, que no solo atiende la emergencia inmediata, sino que también busca soluciones estructurales a largo plazo. Con un cronograma claro para las fases de respuesta y recuperación, el gobierno reafirma su compromiso con la población afectada, asegurando que las comunidades recibirán la asistencia necesaria para superar esta difícil situación.
