El presidente Gustavo Petro volvió a encender el debate político tras asegurar que su gobierno enfrenta un complot para sacarlo del poder antes de terminar su mandato. Durante la convención nacional del partido Mais, el mandatario destacó los desafíos que enfrenta su administración y llamó a sus seguidores a prepararse para lo que describió como un escenario de resistencia política.
Petro afirmó que su gobierno está siendo “acorralado” por sectores de la oposición que buscan debilitar su mandato. “Entonces, ¿al Gobierno cómo le va? El Gobierno está acorralado, al Gobierno lo están acorralando. Nosotros nos hemos defendido un poco con inteligencia, pero la intención de una derecha cada vez más fascista es acorralarnos”, dijo Petro en su discurso.
Según el presidente, hay dos corrientes dentro de sus detractores. Una que pretende permitirle gobernar hasta 2026 pero con una imagen deteriorada, y otra que busca su salida anticipada. “La intención es silenciarnos, golpearnos e incluso sacarnos antes de 2026”, advirtió el jefe de Estado, calificando a sus opositores como una derecha “cada vez más fascista”.
El mandatario también habló sobre un supuesto golpe de Estado en su contra, que según él no sería militar, sino parlamentario. “Estamos ad portas de un golpe de Estado parlamentario. Es una maniobra de quienes compran jueces, temen la verdad y quieren mantener sus privilegios”, expresó Petro, enfatizando que este sería uno de los mayores desafíos de su administración.
Sobrevivir hasta 2026: el principal reto
Para el presidente, llegar al final de su mandato en 2026 se perfila como una tarea compleja pero esencial. “Si logramos llegar a 2026, significa que hemos sobrevivido”, afirmó, subrayando que los próximos años estarán marcados por una fuerte oposición que buscará impedir avances en su agenda de gobierno.
Ante este panorama, Petro hizo un llamado a la organización social y política. Propuso consolidar un amplio movimiento que incluya a indígenas, afrodescendientes, mujeres y juventudes populares como eje para contrarrestar los ataques y construir un camino hacia el cambio. “Debemos prepararnos al máximo, porque lo que puede surgir es el movimiento social más grande en la historia de Colombia antes de 2026”, señaló.
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Pese a su llamado a la unidad, el partido Mais decidió no unirse al Pacto Histórico bajo una sola personería jurídica. En su lugar, algunos líderes, como María José Pizarro, David Racero y Heráclito Landínez, optaron por liderar un movimiento independiente.
