El embajador Armando Benedetti rompió su silencio sobre su relación con el presidente Gustavo Petro, en una entrevista con el periodista Yesid Lancheros. A pesar de los rumores y especulaciones que han circulado sobre su cercanía con el mandatario, Benedetti dejó claro que, más allá de la política, lo que existe entre ambos es una sólida amistad. “Lo que tengo es una amistad con el presidente”, afirmó, enfatizando que la relación no gira en torno a los asuntos políticos.
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Benedetti también abordó el tema de la reelección presidencial, desmintiendo los rumores de que Petro podría estar interesado en un segundo mandato. “Claro que no”, respondió rotundamente, añadiendo que el presidente “a veces dice que está aburrido de ser presidente”. Según el embajador, esta fatiga no proviene de un agotamiento físico, sino de que la personalidad de Petro no se ajusta a los “protocolos y liturgias del poder”, y a menudo se muestra como una persona “ensimismada”, más enfocada en su mundo interno que en las dinámicas del poder.
Además, Benedetti opinó sobre las falencias en la administración de Petro, señalando que el presidente necesita rodearse de personas con más experiencia en el manejo del Estado. “Hace falta gente que entienda lo que es el Estado”, expresó. Para Benedetti, uno de los puntos débiles de la administración actual ha sido la falta de una comunicación eficaz y el seguimiento de los logros del gobierno. “La falta de ejecución es inexperiencia, miedo, torpeza”, aseguró.
Benedetti tiene planes de volver a Colombia
El embajador también reveló que, tras su renuncia a la embajada ante la FAO, tiene planes de regresar a Colombia para involucrarse más en el gobierno. De esta forma, no solo busca mejorar la gestión de Petro, sino también aportar su experiencia para superar los retos que enfrenta el país.
Finalmente, al ser cuestionado sobre si este ha sido el gobierno del cambio, Benedetti fue tajante: “Petro sigue siendo Petro y eso es bastante. A él no lo cambió el poder y entonces el cambio sigue vivo”. Sobre su futuro, predijo que en 2026, una vez concluido su mandato, Petro “lo veo tuiteando y fregando la vida”, descartando cualquier interés en un segundo periodo presidencial.
