Más de 200 jóvenes de todo el país se reunirán el próximo lunes 2 de diciembre de 2024 en el Congreso de la República para presentar sus propuestas sobre la implementación del Servicio Social para la Paz, una alternativa al servicio militar obligatorio, reglamentada por el Decreto 1079 de 2024. El evento, liderado por el senador Iván Cepeda, autor de la iniciativa, busca promover la participación activa de la juventud colombiana en la construcción de paz.
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El Servicio Social para la Paz ofrecerá a los jóvenes de 18 a 24 años la posibilidad de contribuir a la paz del país mediante actividades como la alfabetización digital en zonas rurales, la protección del medio ambiente. También el trabajo con víctimas del conflicto armado y la promoción de la cultura de paz. Aunque el servicio militar seguirá vigente, este nuevo mecanismo será una opción para aquellos que deseen evitar las tareas militares y en su lugar involucrarse en proyectos que promuevan la reconciliación.
Jóvenes de diversas regiones expondrán sus ideas para el Servicio Militar
En el evento, se presentarán distintas modalidades de servicio, y jóvenes de diversas regiones expondrán sus ideas para optimizar su implementación. Los participantes también podrán discutir temas relacionados con la participación juvenil en procesos sociales y el impacto de esta alternativa en sus comunidades.
El senador Cepeda resaltó que este mecanismo, que comenzará a operar en 2025, no reemplaza el servicio militar obligatorio, sino que lo complementa. Los jóvenes seguirán siendo llamados al servicio militar, pero podrán optar por la alternativa del Servicio Social para la Paz, con la posibilidad de recibir una remuneración económica y descuentos en programas educativos como los ofrecidos por el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena).
Aunque la propuesta ha recibido el apoyo de diversas organizaciones sociales, ha sido objeto de críticas por parte de veteranos de la fuerza pública, quienes advierten que esta opción podría afectar el sistema de reclutamiento. Sin embargo, Cepeda defendió la iniciativa asegurando que no busca debilitar a las Fuerzas Militares, sino ofrecer a los jóvenes una vía para contribuir de manera activa a la paz. Mientras que los vacíos dejados por quienes opten por el servicio social serán cubiertos por soldados profesionales.