En un contundente discurso desde Barranquilla, el presidente Gustavo Petro criticó duramente a los congresistas que, en las últimas horas, hundieron la reforma tributaria propuesta por su gobierno, la cual buscaba recaudar 9,8 billones de pesos para financiar programas sociales. El mandatario tildó de “descarados” a los parlamentarios responsables de bloquear la ley, acusándolos de poner en peligro la prosperidad del país y profundizar la desigualdad social en Colombia.
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“Maldito el parlamentario que a través de las leyes destruye la prosperidad de su propia tierra, de su propio pueblo”, expresó Petro, quien señaló que estos legisladores deberían enfrentar un “juicio político” por su decisión. El presidente subrayó que el hundimiento de la reforma tributaria había llevado al país al borde del default, poniendo en riesgo el cumplimiento de las obligaciones del Gobierno.
Petro arremetió contra Alejandro Chat por su ausencia en el evento
Petro también aprovechó la ocasión para criticar al alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, por su ausencia en el evento y por su falta de acción en defensa de los más afectados por la decisión del Congreso. “Char y sus parlamentarios, pegados a los negocios particulares, no fueron capaces de dar la batalla para hacer respetar a su Barranquilla”, declaró el mandatario, acusando a Char y a otros parlamentarios de permitir que los intereses privados prevalecieran sobre el bienestar del pueblo.
El presidente afirmó que la decisión del Congreso solo busca posicionar a ciertos grupos políticos con miras a las elecciones de 2026, con la intención de seguir aplicando impuestos al pueblo mientras se conceden exenciones a los más ricos. “Descarados, ¿cómo se atreven a hundir una ley de financiamiento ante el pueblo que los eligió?”, cuestionó, destacando que los impuestos deben ser dirigidos a los más ricos para construir una Colombia más justa.
Petro concluyó su intervención reafirmando que, a pesar del revés legislativo, su gobierno continuará luchando por una reforma fiscal progresiva que permita reducir la desigualdad y financiar los programas sociales necesarios para el desarrollo del país.