Después de una audiencia de más de nueve horas, la exconsejera Sandra Ortiz fue enviada a prisión el 18 de diciembre de 2024, por su vinculación en el escándalo de corrupción relacionado con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Ortiz, quien fue imputada por los delitos de lavado de activos y tráfico de influencias, es señalada de ser el enlace entre la UNGRD y los presidentes del Senado y la Cámara de Representantes, a quienes habría entregado coimas para favorecer reformas del Gobierno en el Congreso.
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La decisión de la juez tercera penal municipal de Bogotá se basó en las pruebas presentadas por la Fiscalía, incluyendo testimonios clave como el de Sneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD, quien aseguró que Ortiz fue la mensajera encargada de entregar 3.000 millones de pesos al entonces presidente del Senado, Iván Name. Pinilla relató que acompañó a Ortiz a un sitio en Bogotá donde se efectuó la entrega, aunque no estuvo presente cuando el dinero fue entregado al senador.
Fiscalía presentó pruebas contra Sandra Ortiz
Además, la Fiscalía presentó pruebas de que Ortiz habría eliminado conversaciones de WhatsApp relacionadas con el pago de los sobornos, lo que aumentó las sospechas sobre su intento de obstruir la justicia. La jueza consideró que la exfuncionaria representa un peligro para la sociedad y podría interferir con las pruebas y el testimonio de los testigos. En este contexto, se decidió su traslado a la cárcel de mujeres El Buen Pastor.
El escándalo, que también involucra a otros funcionarios de la UNGRD, ha sacudido al gobierno de Gustavo Petro, que enfrenta fuertes acusaciones de corrupción en sus filas. La medida de aseguramiento de Ortiz llega en un momento clave, ya que se espera que otros implicados en el caso también sean llamados a rendir cuentas en los próximos días.