El 18 de diciembre, el Gobierno nacional expidió el Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2025 por un total de $511 billones, luego de que el Senado de la República hundiera el proyecto original que proponía una cifra de $523 billones, incluyendo $12 billones contingentes que debían ser aprobados a través de la Ley de Financiamiento.
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A pesar de que el Congreso debía aprobar el PGN antes del 20 de octubre, el 24 de septiembre las comisiones económicas del Senado y la Cámara decidieron no seguir adelante con la iniciativa. El 11 de diciembre, también se rechazó la Ley de Financiamiento, lo que obligó al Gobierno a expedir el PGN a través del Decreto 1523, en cumplimiento con el artículo 59 del Estatuto Orgánico del Presupuesto y el artículo 348 de la Constitución Nacional.
Presupuesto ajustado tras descontar $12 billones de tributaria fallida
El presupuesto fue ajustado para descontar los $12 billones de la ley tributaria fallida, lo que dejó la cifra final en $511 billones. Sin embargo, varios analistas, como Julio Romero de Corficolombiana, han señalado que el presupuesto está desfinanciado en más de $12 billones y que el Gobierno debe realizar recortes de entre $35 billones y $50 billones para cumplir con la regla fiscal de 2025.
El déficit fiscal podría alcanzar hasta el 6,5% del Producto Interno Bruto (PIB), según las proyecciones de Romero, superando el límite del 4,9% estipulado por la regla fiscal. Este escenario hace que la sostenibilidad del presupuesto esté comprometida, obligando al Gobierno a ajustar gastos y buscar una mayor eficiencia en la recolección de impuestos, especialmente de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian).
Por otro lado, algunos economistas, como el profesor Juan Pablo Sandoval, defienden que el Gobierno ha actuado de manera responsable y que los recortes propuestos son adecuados, confiando en las perspectivas de crecimiento económico y en el impacto positivo de la inversión pública.
El debate sobre la viabilidad del Presupuesto de 2025 continúa, mientras el Gobierno se prepara para realizar ajustes adicionales en enero de 2025 para garantizar el cumplimiento de las normas fiscales y asegurar la estabilidad financiera del país.