El presidente Gustavo Petro reaccionó a través de sus redes sociales a las declaraciones del expresidente Álvaro Uribe, quien calificó el aumento del salario mínimo como una medida que podría incentivar la informalidad laboral y afectar la sostenibilidad de las empresas. Petro, en un tono crítico, recordó que una propuesta clave de su administración para reducir los impuestos a las empresas fue bloqueada por la bancada uribista en el Congreso.
“Lástima que su bancada, Álvaro, hundió la ley de financiamiento donde reducíamos el impuesto de renta a todas las empresas de Colombia, del 35% al 30%”, escribió el mandatario en respuesta a las críticas de Uribe. La propuesta mencionada por Petro formaba parte de un paquete de reformas que buscaban incentivar la competitividad empresarial mientras se fortalecía la capacidad adquisitiva de los trabajadores.
Uribe, por su parte, había argumentado que el aumento del salario mínimo sin medidas que favorezcan al empresariado podría generar más empleos informales y precarización laboral. El expresidente destacó la necesidad de impuestos más bajos y regulaciones laborales menos rígidas para garantizar la sostenibilidad del sector privado.
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Petro, en cambio, ha defendido su modelo económico como un equilibrio entre los intereses de trabajadores y empresarios, argumentando que el aumento del salario mínimo no solo beneficia a las familias colombianas, sino que también estimula el consumo y fortalece la economía.
El cruce de opiniones entre los dos líderes refleja las tensiones políticas y económicas que acompañan las decisiones sobre el salario mínimo en el país. Mientras tanto, gremios empresariales y trabajadores continúan divididos respecto al impacto del reciente aumento del 9,54%, que eleva el salario mínimo a $1.623.500 para 2025.
