El proceso de formalización laboral para docentes de educación superior en Colombia ha dado un paso clave con la firma de un nuevo decreto por parte del presidente Gustavo Petro. Esta medida busca garantizar estabilidad y condiciones laborales más justas para miles de profesores en universidades públicas del país.
Desde el Ministerio de Educación se ha destacado que este decreto es un hito en la transformación del sistema educativo, ya que establece un marco para que las instituciones públicas prioricen la contratación estable. El objetivo principal es reducir progresivamente los vínculos temporales y fomentar la dignificación del trabajo docente a través de concursos de méritos y la carrera administrativa.
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Un compromiso con la justicia laboral
El ministro de Educación, Daniel Rojas, subrayó la importancia de esta medida y señaló que la calidad educativa no puede separarse de la estabilidad laboral de los docentes. “No podemos aspirar a la excelencia en la educación superior si los profesores no cuentan con condiciones dignas. Muchos de ellos tienen estudios avanzados y aún así enfrentan una precarización inaceptable”, afirmó el funcionario.
El Ministerio del Trabajo, liderado por Antonio Sanguino, ha sido una pieza clave en la construcción de este decreto, que contó con la participación de representantes sindicales y mesas técnicas de diálogo. En total, se llevaron a cabo 12 reuniones con gremios como ASPU, Sintraunicom y Utradec, en las que se definieron los lineamientos de esta política pública.
En ese sentido, la nueva norma responde a una problemática de larga data que ha sido documentada por la Corte Constitucional en sentencias previas y por entidades como el Sistema Universitario Estatal (SUE). Además, da continuidad a compromisos adquiridos en 2018 para fortalecer el sistema de educación superior pública a través de decisiones estructurales y financiamiento de largo plazo.
El decreto también se enmarca dentro de los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo “Colombia Potencia Mundial de la Vida”, alineándose con estándares internacionales como el Convenio 151 de la OIT y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en lo referente a trabajo decente y educación de calidad.
Aunque se respeta la autonomía de cada universidad pública, el Gobierno ha hecho un llamado a las instituciones para que avancen en la dignificación laboral de sus docentes y administrativos.
Con esta decisión, el Ejecutivo espera que cerca de 38.000 docentes y trabajadores de la educación superior puedan acceder a procesos de formalización, marcando un cambio significativo en el panorama laboral del sector educativo en Colombia.
