El panorama epidemiológico de Colombia se complica con el avance de la fiebre amarilla, una enfermedad viral transmitida por mosquitos que ha dejado, en poco más de un año, 70 personas contagiadas y 33 fallecidas. Ante el incremento inusual de casos, el Ministerio de Salud anunció que declarará emergencia sanitaria en varias regiones del país, con el fin de reforzar las medidas de prevención y ampliar el acceso a la vacuna.
A través de la Circular 012, la cartera de Salud dio luz verde a la implementación de jornadas intensivas de vacunación en municipios con casos recientes, en departamentos con múltiples territorios afectados, así como en zonas con alto flujo de personas que podrían facilitar la expansión del virus.
“La fiebre amarilla ya no es un asunto exclusivo de la selva o del sur del país. Está tocando las puertas de regiones donde jamás se había visto”, advirtió el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo durante una rueda de prensa el pasado jueves.
El virus se expande hacia zonas inusuales
Los departamentos de Tolima y Caldas han encendido las alertas tras la aparición de casos en municipios donde históricamente no se habían registrado brotes. Purificación, Prado, Villarrica y Dolores, en el oriente del Tolima, concentran buena parte de los contagios: 45 en total, con 18 víctimas fatales. La enfermedad también ha sido confirmada en Ataco y Palocabildo, así como en Neira, Caldas.
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Estas cifras reflejan un cambio preocupante en el comportamiento del virus. Según datos del Instituto Nacional de Salud, solo entre enero y marzo de 2025 se han registrado 47 casos, con una letalidad cercana al 50 %. Esto significa que, en promedio, una de cada dos personas que contrae el virus fallece.
A nivel regional, Colombia es el segundo país con más muertes por fiebre amarilla, solo por detrás de Brasil. Según la Organización Panamericana de la Salud, hasta el 12 de marzo se habían notificado 131 casos en América Latina, con 53 fallecimientos: 81 casos en Brasil, 31 en Colombia, 18 en Perú y 1 en Bolivia.
Llamado urgente a la vacunación
“La única herramienta efectiva que tenemos contra esta enfermedad es la vacuna”, insistió Diana Pava, directora del Instituto Nacional de Salud, quien recalcó que la fiebre amarilla es una enfermedad viral grave que puede provocar fallos hepáticos, renales y neurológicos si no se detecta a tiempo.
El Gobierno recordó que, desde ahora, la vacuna está disponible para todas las personas mayores de un año, sin límite de edad. Esto tras corregir una omisión en el plan de inmunización que excluía a adultos mayores de 60 años. “Yo mismo, con 74 años, me vacuné y no sabían que no me correspondía. Eso fue un error que ya corregimos”, reconoció el ministro Jaramillo.
La fiebre amarilla se manifiesta inicialmente con fiebre, vómito y dolores musculares, pero en casos graves puede causar hemorragias, ictericia e insuficiencia orgánica múltiple. Su transmisión se da a través de mosquitos como el Aedes aegypti, lo que incrementa el riesgo en zonas tropicales y rurales con baja cobertura de vacunación.
Colombia cuenta con 388 municipios considerados en riesgo por su geografía y condiciones climáticas. Las autoridades piden reforzar medidas básicas como el uso de toldillos, la eliminación de criaderos de zancudos y la consulta médica inmediata ante síntomas sospechosos.
El Ministerio insiste en que cualquier caso sospechoso debe ser reportado de inmediato y tratado con prioridad. El objetivo es frenar la expansión del brote antes de que se convierta en una emergencia nacional de mayores proporciones.