La conmoción por el caso de abuso en un hogar del ICBF en Bogotá aún no se disipa, cuando una nueva y alarmante denuncia sacude al municipio de Fusagasugá. Una niña de apenas cuatro años habría sido víctima de abuso sexual en un jardín infantil privado. Lo más grave del caso es que no sería la única menor afectada.
El caso salió a la luz el pasado 8 de mayo, cuando la madre de la niña denunció el abuso ante el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) que su hija habría sido víctima de tocamientos inapropiados en el jardín infantil “Centro Integral Pilos y Pilosos”, ubicado en el barrio Villa Patricia.
La denuncia encendió las alarmas de las autoridades locales. El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, confirmó la información y aseguró que se activó de inmediato la ruta de protección a la infancia. También se tomaron medidas para preservar los derechos de la menor.
“Se iniciaron las acciones de atención con el ICBF. Estamos comprometidos con la seguridad y el bienestar de todos los niños y niñas del departamento”, afirmó el mandatario.
Cuatro menores bajo evaluación
El ICBF ordenó el traslado de otros cuatro niños que asistían al mismo centro educativo hacia su sede central en Bogotá. Allí se les practicarán valoraciones médicas y psicológicas, en busca de determinar si también fueron víctimas de abuso. A la menor de cuatro años ya se le practicó un examen médico legal en el Hospital San Rafael de Fusagasugá. Además, este lunes 12 de mayo, una funcionaria del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) realizará la entrevista forense, que será pieza clave en el proceso penal.
Tras una inspección de la Policía de Infancia y Adolescencia, se determinó que el jardín incumplía varios requisitos de ley. Por ello, se suspendió su funcionamiento por un periodo inicial de diez días mientras avanza la investigación. Además, el presunto abusador ya fue identificado y se trata de un joven de 21 años, quien al parecer trabajaba en el centro educativo. El caso será llevado por una fiscal especializada en Bogotá.
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Este nuevo escándalo se suma al reciente caso del hogar infantil en Villa Javier, Bogotá, donde Freddy Arley Castellano habría abusado de al menos 12 menores. La repetición de estos hechos evidencia una preocupante falla en los controles de protección infantil. La comunidad de Fusagasugá exige justicia y garantías reales de seguridad para los más pequeños. Las autoridades, por ahora, aseguran que no habrá tolerancia frente a este tipo de crímenes.
