Este miércoles 25 de junio, el presidente Gustavo Petro firmó la reforma laboral. Con este paso, el proyecto oficialmente se convierte en ley. Lo hizo en plaza pública, en el Museo Casa Quinta de Bolívar, Bogotá. Estuvo acompañado de sus ministros, del presidente de la Cámara, Jaime Salamanca, y de la representante María Fernanda Carrascal. “Hay que elegir un gobierno que garantice que se cumpla”, fueron unas de sus palabras, proyectadas hacia las elecciones del 2026. Minutos antes, el presidente también sancionó una ley de salud mental.
En su discurso, Petro se fue en contra de los senadores que se opusieron a la reforma laboral. Particularmente contra los ocho senadores de la Comisión Séptima que inicialmente firmaron el archivo del proyecto. “Con sus nombres propios quisieron sabotearla (a la reforma laboral). Véala aquí: no sirvió de nada”, dijo el presidente. Petro además calificó de “histórica” la sanción. Más temprano, Presidencia publicó la directriz que derogó el decreto de la consulta popular, tal como había prometido Petro una vez se aprobó la conciliación de la laboral en el Congreso.
La reforma aprueba el contrato laboral para aprendices del Sena, los recargos para domingos y festivos del 100% —que empezarán progresivos del 75%— y establece las horas extra desde las 7 p.m. hasta las 6 a.m., las cuales regirán seis meses después de que la reforma entre en vigencia. También elimina el trabajo por horas y la jornada del 4×3.
Otro triunfo para el gobierno: petrismo celebra
Ad portas de sancionar la reforma, políticos y congresistas del Pacto Histórico celebraron. “Hay que recordar que fue el gobierno de Álvaro Uribe el que le quita los derechos laborales a los colombianos”, le dijo a CW+ Noticias Camilo Romero, precandidato presidencial de la izquierda y exembajador de Colombia en Argentina. “Buena parte de la reforma recupera derechos que se perdieron hace años. Estamos devolviéndole el amor que el pueblo también ha puesto en este gobierno”, aseguró por su parte el exministro de Minas, Andrés Camacho.
Las senadoras del Pacto, Gloria Flórez e Isabel Zuleta, también alzaron su voz de alegría por la sanción de la laboral. “El pueblo votó por las reformas, votó por el cambio y nosotros tenemos que cumplir”, dijo Flórez. La celebración se dio en medio de un público eufórico, que aclamaba la sanción presidencial entre arengas y gritos.
La insistencia de Petro por una Constituyente no se va
En medio de todo este panorama, el presidente insiste en que es “necesario” convocar una Asamblea Nacional Constituyente. Ha lanzado ese globo desde el año pasado. Aunque las aguas se calmaron a mitad del 2024 con la llegada del exministro del Interior, Juan Fernando Cristo, este año volvieron a agitarse. El presidente revoca al “constituyente primario” —el pueblo— como el dueño del poder. E insiste en convocar la constituyente parra reformar la Constitución de 1991.
“No quieren la constitución del 91. Yo le he propuesto a la sociedad colombiana que se autocomboque”, dijo Petro al sancionar la reforma.
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