Con voz quebrada y rodeado de familiares, amigos y figuras políticas, Miguel Uribe Londoño revivió uno de los momentos más dolorosos de su vida. Hace 34 años, en ese mismo lugar, cargó en un brazo a su hijo pequeño y en el otro el ataúd de su esposa, la periodista Diana Turbay, asesinada por el Cartel de Medellín en 1991. Hoy, en una dolorosa repetición de la historia, despidió a ese mismo niño convertido en un hombre que, como senador, defendió con firmeza sus ideas: Miguel Uribe Turbay.
Durante la ceremonia, Uribe Londoño describió a su hijo como un esposo y padre ejemplar, además de un líder comprometido con la lucha contra la violencia. Resaltó que, incluso en la tragedia, Miguel logró unir a colombianos de diferentes corrientes políticas en un mismo clamor por justicia.
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El padre del legislador señaló que la muerte de su hijo no es un hecho aislado, sino parte de un conflicto que el país no ha logrado superar. “Callaron a Miguel, pero no podrán callar la voz de millones de colombianos que piden un cambio”, advirtió, señalando que la violencia tiene responsables claros y que no se puede permitir que siga imponiéndose.
En su discurso, llamó a evitar la resignación y a rechazar la venganza como respuesta. Invitó a enfrentar la crisis con serenidad e inteligencia, manteniendo la unidad nacional frente a la amenaza de quienes pretenden perpetuar la guerra. “Tenemos una responsabilidad histórica: derrotar la oscuridad que quiere condenarnos para siempre”, concluyó.
Sepultado Miguel Uribe en Bogotá: así fue el último adiós
Este miércoles 13 de agosto, cerca de las 3 de la tarde, el exsenador y ex precandidato presidencial, Miguel Uribe Turbay, fue sepultado en el Cementerio Central de Bogotá. Su sepelio se dio luego de tener su cuerpo en cámara ardiente en el Congreso por casi tres días. Este día estuvo marcado por lágrimas, discursos y un panorama solemne, reforzado por la lluvia y el gris del cielo bogotano.
Uribe Turbay murió en la madrugada del 11 de agosto. Estuvo dos meses en estado crítico en la Clínica Santa Fe tras sufrir un atentado en un parque de Modelia, en la localidad de Fontibón (Bogotá) mientras hacía campaña. Su asesinato fue calificado por la Fiscalía como magnicidio. Hasta ahora, van seis capturados en el marco de la investigación del caso. Entre ellos, el menor de 15 años que le disparó.
El féretro con el cuerpo de Uribe Turbay llegó al Salón Elíptico del Congreso en la noche del 11 de agosto. Ahí se mantuvo en cámara ardiente, rodeado de su familia, congresistas, expresidentes, simpatizantes y ciudadanos. Ni el presidente Gustavo Petro, ni la vicepresidenta Francia Márquez, ni ningún funcionario del gobierno asistieron a la velación y el sepelio por petición de su familia.