El anuncio surge después de que 45 soldados fueran liberados tras ser retenidos por campesinos en El Tambo, Cauca. El Ejército calificó el hecho como un secuestro, atribuyéndolo a la estructura criminal ‘Carlos Patiño’.
Petro relacionó este tipo de tácticas violentas con la “estrategia mafiosa” de usar civiles como escudos y advirtió que eso justificaría el uso de aspersión aérea en cultivos ilícitos en esas zonas.
¿Qué dijo el presidente y por qué revisarlo?
El mandatario pidió a la Corte Constitucional reconsiderar el fallo que prohíbe la fumigación con glifosato sin protocolos de protección ambiental y consulta previa.
Actualmente, la aspersión con este herbicida está suspendida desde 2015, principalmente por sus riesgos para la salud y el ecosistema.
Nuevas tecnologías como posible alternativa
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, agregó que se está explorando el uso de drones para fumigar de manera más focalizada, reduciendo posibles impactos ambientales.
Esto marcaría un cambio significativo en la aplicación técnica de la aspersión aérea y en los mecanismos de control para proteger áreas no afectadas.
Implicaciones y desafíos
La propuesta de Petro supone un giro radical en su política antidrogas. Durante su campaña, rechazó rotundamente la fumigación aérea, ahora la condiciona a agresiones contra tropas.
Además, el anuncio ocurre mientras Colombia enfrenta presión internacional: Estados Unidos podría revocar su certificación antidrogas si no se mejora la lucha contra los cultivos ilícitos.