Horas después de que el Tribunal Superior de Bogotá ordenara su captura inmediata, el exministro del Interior, Luis Fernando Velasco, se entregó voluntariamente a las autoridades en la capital del Valle del Cauca la noche del jueves 18 de diciembre. Velasco, oriundo de la región, decidió presentarse ante la justicia local tras una extensa audiencia de 12 horas en la que se revocó su beneficio de detención domiciliaria.
El proceso de entrega y traslado
La entrega se realizó bajo estrictas medidas de seguridad. Tras presentarse en Cali, Velasco fue reseñado y posteriormente trasladado a la ciudad de Bogotá para quedar a disposición del Inpec.
- Ratificación judicial: el Tribunal Superior de Bogotá negó de plano los recursos presentados por la defensa, calificando la participación de Velasco en el entramado de la UNGRD como una pieza clave para la compra de votos en el Congreso.
- Argumento del peligro: la magistrada Aura Alexandra Rosero insistió en que el exministro representa un “peligro para la comunidad” debido a la naturaleza de los delitos que afectaron la transparencia institucional del país.
El papel de Velasco en la repartición de coimas
Las investigaciones de la Fiscalía General de la Nación vinculan directamente a Velasco con el direccionamiento de recursos públicos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
- Compra de apoyos: según las pruebas presentadas, Velasco habría coordinado la entrega de contratos y coimas a excongresistas con el fin de asegurar la aprobación de las reformas estructurales del gobierno de Gustavo Petro.
- Cargos imputados: el exministro enfrenta cargos por concierto para delinquir agravado, cohecho e interés indebido en la celebración de contratos.
- Testimonios clave: las declaraciones de Olmedo López y Sneyder Pinilla han sido fundamentales para establecer la hoja de ruta de cómo se habrían distribuido los dineros de la UNGRD bajo directrices que involucraban a altos cargos del Ejecutivo.
¿Qué pasará con Ricardo Bonilla?
Mientras Velasco ya se encuentra bajo custodia, la situación del exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, también bajo orden de captura intramural, sigue siendo objeto de seguimiento por parte de las autoridades. Se espera que en las próximas horas se concrete su ingreso a un centro penitenciario para cumplir con la medida impuesta por el Tribunal.
Este capítulo marca uno de los golpes más contundentes a la administración actual, poniendo en jaque la legitimidad del trámite de sus reformas en el legislativo.
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