La familia de Miguel Rodríguez Orejuela, antiguo jefe del Cartel de Cali, presentó ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos una solicitud de libertad anticipada. La petición se basa en el deterioro de la salud del excapo, quien actualmente enfrenta problemas de demencia senil, según los abogados que lo representan.
Esta inesperada solicitud ha vuelto a poner sobre la mesa la historia judicial de uno de los capítulos más conocidos del narcotráfico colombiano y su impacto internacional. Actualmente, Miguel Rodríguez Orejuela permanece recluido en una cárcel de seguridad media en Estados Unidos, donde cumple condena desde hace casi dos décadas.
Según los abogados de la familia, la condición médica del excapo ha motivado la solicitud de excarcelación antes del cumplimiento total de la pena. El entorno familiar espera que esta situación permita reconsiderar su permanencia en prisión por motivos humanitarios.
En recientes declaraciones a medios, William Rodríguez, hijo de Miguel, ha aclarado que los rumores sobre una liberación inmediata no se ajustan a la realidad. Recordó que el excapo todavía tiene varios años por cumplir y que la fecha estimada de salida es 2028. También descartó cualquier vínculo reciente de la familia con la administración del club de fútbol América de Cali, tradicionalmente asociado al clan.
Antecedentes judiciales
La historia de los Rodríguez Orejuela se remonta a la captura de Gilberto Rodríguez en 1995, operación que involucró a las autoridades colombianas y a la DEA estadounidense. La desarticulación del Cartel de Cali evidenció la magnitud de la organización, que controlaba cerca del 80 % de la cocaína que ingresaba a Estados Unidos entre 1990 y 2000.
A diferencia de otros grupos del narcotráfico, los hermanos Rodríguez Orejuela privilegiaron la discreción y la infiltración institucional. Funcionarios de la DEA resumieron su estrategia señalando que el poder del cartel se consolidaba mediante estructuras organizadas y sobornos, más que por violencia directa.
Al día de hoy, la influencia del Cartel de Cali se ha reducido significativamente debido al encarcelamiento de sus líderes y al envejecimiento de sus miembros.
