La primera semana solo fue la punta del iceberg de toda la cumbre. La segunda semana de la COP16, que se llevará a cabo del 28 de octubre al 1 de noviembre, será crucial para definir el futuro de la biodiversidad, pues se adelantarán las negociaciones de más alto nivel. Con la llegada de más de 10 jefes de Estado, el enfoque se centrará en negociaciones de alto nivel, incluyendo el controversial tema del intercambio de deuda por preservación, impulsado por el presidente Gustavo Petro.
El fin de semana de la primera semana estuvo cargado de discusiones, abarcaron temas como la protección del océano, el Chocó Biodiverso, y el papel de las ciudades en la conservación, que se discutió en la cumbre de alcaldes.
Ahora, la atención estará centrada en dos foros clave sobre la financiación. Por un lado, el foro de biodiversidad y negocios; en donde las partes avanzarán en construir una declaración de como el sector privado puede apoyar a la realización de los planes de biodiversidad y hacia un futuro en que la economía circular sea la prioridad.
Por otro lado, las discusiones más esperadas tendrán lugar en el día de las finanzas y biodiversidad; donde varios ministros de economía de todo el mundo llegarán a dialogar sobre temas como la bioeconomía o la condonación de deuda por protección amazónica.
El evento culminará con la llegada de líderes de países como México, Perú, Panamá, Honduras, Ghana, Surinam, Mozambique, Haití y Guinea Bisáu, junto a los vicepresidentes de Cuba y Kenia. A pesar de la confirmación de asistencia de estos funcionarios, el principal aliado de Petro en esta lucha, el presidente de Brasil, Lula Da Silva, no se presentará por temas de salud, hecho que confirmó al decir “incluso Lula me dejó solo”.
En esta parte decisiva de la cumbre se firmarán acuerdos de alto nivel con los jefes de Estado y compromisos de los países con el marco Kunming Montreal, además se espera tener ya firmados todos los nuevos puntos acordados en las demás mesas de negociación.
En estos nuevos documentos, se incluirá la voz de poblaciones indígenas, afro, mujeres y juventud. Principalmente, los planes de acción para proteger la biodiversidad serán un eje central dentro del documento, pues solo 35 países lo presentaron y deben avanzar en estos para realizar acciones contundentes para proteger la biodiversidad. Planes que en países como Colombia tendrán un costo de 76 billones de pesos.