Las autoridades mexicanas descubrieron los cuerpos de nueve estudiantes desmembrados dentro y alrededor de un automóvil en una carretera que une Oaxaca y Puebla. El caso, que ha conmocionado al país, estaría vinculado con la desaparición de un grupo de estudiantes de Tlaxcala.
El hallazgo ocurrió el domingo 2 de marzo en el kilómetro 83+500 de la autopista Cuacnopalan-Oaxaca. Un Volkswagen Vento gris oscuro fue abandonado en la orilla de la vía, lo que llamó la atención de varios conductores. Tras recibir el reporte, la Guardia Nacional se desplazó al sitio y, al revisar el automóvil, se encontraron con los restos de los estudiantes.
Dentro del baúl, los oficiales hallaron bolsas llenas de restos humanos, mientras que otros cadáveres estaban esparcidos alrededor del vehículo. Los agentes hallaron una bolsa con 16 manos humanas con evidencia que alguien mutiló a algunas víctimas antes de asesinarlas.
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Signos de tortura en los cuerpos de los estudiantes
Los cuerpos de los estudiantes presentaban señales de tortura, algunos estaban desmembrados y otros tenían impactos de bala. Cuatro cadáveres fueron encontrados dentro del maletero, mientras que los otros cinco yacían cubiertos con lonas ensangrentadas en las inmediaciones del automóvil.
Las autoridades destacaron la brutalidad del crimen, señalando que los restos humanos mostraban signos de extrema violencia. El hallazgo ha generado una ola de indignación en el país, mientras se investiga el motivo detrás de este asesinato masivo.
Vínculo con estudiantes desmembrados desaparecidos en Tlaxcala
Inicialmente, la identificación de las víctimas resultó complicada. Sin embargo, el 5 de marzo, la Fiscalía General del Estado de Puebla confirmó que los cuerpos correspondían a cinco hombres y cuatro mujeres originarios de Tlaxcala. Todos ellos habían sido reportados como desaparecidos en febrero tras un viaje a las playas de Oaxaca.
Sus familiares habían iniciado una intensa búsqueda en redes sociales y ante las autoridades, sin imaginar el trágico desenlace. La noticia de su hallazgo ha causado un gran impacto en la comunidad, que ahora exige justicia y respuestas sobre lo ocurrido.
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Últimos rastros de los jóvenes antes de su desaparición
Los estudiantes fueron vistos por última vez entre los destinos turísticos de Huatulco y Zipolite. De acuerdo con las denuncias presentadas a la Fiscalía, los reportes de desaparición se registraron entre el 27 y 28 de febrero, justo antes de perder toda comunicación con sus familiares.
Las autoridades investigan si fueron víctimas de un secuestro o si estuvieron involucrados en un crimen organizado, aunque hasta el momento no se ha confirmado ninguna hipótesis. Se espera que los avances en la investigación revelen más detalles sobre el caso en los próximos días.
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Una sobreviviente clave en la investigación
Las autoridades localizaron con vida a Brenda Mariel Salas, de 19 años, días después en Puebla. La Fiscalía no ha revelado detalles sobre cómo llegó hasta allí ni en qué condiciones se encuentra, lo que ha despertado aún más incógnitas. Su testimonio podría ser clave para esclarecer qué ocurrió con el grupo y quiénes están detrás del brutal crimen. La joven se encuentra bajo protección mientras las autoridades continúan con las investigaciones.
Las autoridades continúan con las diligencias para esclarecer el caso, identificando posibles responsables y determinando el móvil del crimen. La brutalidad del hallazgo ha encendido nuevamente la alerta sobre la crisis de seguridad en el país, donde miles de desapariciones siguen sin resolverse. Mientras tanto, las familias de las víctimas claman por justicia y exigen respuestas inmediatas a las autoridades.
