Un hombre eligió un escenario natural impactante para su propuesta de matrimonio: la cima de una cascada en un parque natural. Con el sonido del agua de fondo y el entorno rodeado de naturaleza, se arrodilló frente a su novia para entregarle el anillo de compromiso. Todo apuntaba a un momento perfecto, preparado para ser recordado toda la vida.
El instante, grabado por un acompañante o quizás con ayuda de un trípode, parecía sacado de una película romántica. Sin embargo, segundos después de sacar el anillo, el protagonista perdió el equilibrio. En un giro inesperado, su pie resbaló sobre la roca mojada y cayó directamente a la cascada. La escena, que pasó del romance al susto en segundos, dejó a la novia en shock.
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De lo emotivo a lo viral: internet reacciona
El video de la propuesta de matrimonio en la cascada se difundió en redes sociales y no tardó en volverse viral. Miles de usuarios lo compartieron con comentarios que mezclaban sorpresa, preocupación y carcajadas. Aunque al principio muchos temieron lo peor, luego se supo que el hombre salió ileso, lo que permitió que el tono de la conversación cambiara hacia el humor.
Algunos internautas lo calificaron como “la propuesta más inolvidable del año”, mientras que otros lo tomaron como una advertencia sobre lo riesgoso de planear momentos especiales en sitios extremos. Memes, parodias y hasta remixes musicales con la caída comenzaron a circular en plataformas como TikTok, Instagram y X.
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Amor a prueba de caídas
Pese al accidente, el protagonista del incidente no solo sobrevivió a la caída, sino que logró su propósito: su novia dijo que sí. En imágenes posteriores al incidente, ambos se mostraron sonrientes, abrazados y riéndose de lo ocurrido. Según contaron en una publicación posterior, el anillo también sobrevivió al chapuzón.
Este episodio se convirtió en una historia con final feliz que muchos seguirán recordando. El romanticismo, el humor involuntario y la capacidad de sobreponerse al susto demostraron que, a veces, el amor también sabe nadar. Y aunque la caída fue real, también lo fue la intención de entregar el corazón en lo más alto… literalmente.