Por: Miguel Angel Arango
Alcaldía de Cali
EL EMPATE NO EXISTE
A cinco semanas de las elecciones y de acuerdo con el comportamiento de las encuestas y el acomodo de las fuerzas políticas la percepción en Cali es que ya todo está consumado.
Aparece un Roberto Ortiz, que ha ganado todas las encuestas y que en la última medición de Invamer le sacó 23 puntos porcentuales de diferencia a Alejandro Eder, que registró de segundo.
Aparentemente ya las estrategias quedaron al descubierto y se agotaron las propuestas que se volvieron lugares comunes en lo que tiene que ver con la seguridad y que se convierte en el mayor reclamo de los caleños.
En la última semana el barrullo lo armó Armitage al exigir a su candidata Diana Rojas, que se retirara porque no va a ganar y que como hay que salvar a Cali se sumara a otro candidato de quien no dio nombre pero todos entendimos que la orden fue apoyar a Eder.
La estrategia no produjo el efecto buscado pero si evidenció la dependencia de Diana Rojas, de su patrón Armitage a quien ella llama su jefe. La soberbia del exalcalde y al impartir su orden de señor feudal hizo más daño que bien a los dos candidatos en mención. “Yo la puse y yo la quito cuando me dé la gana”, fue el mensaje que les llegó a los ciudadanos por parte de don Maurice.
Mientras tanto el “chonto” sigue con sus caminatas en las comunas y la muchedumbre se ve entusiasta y triunfalista. Tanta gente en la calle la moviliza el creer que el candidato es ganador, pero también se trata de lugares visitados de manera recurrente por Ortiz. Pero al lado de estos dos hechos aparece el poderío de las fuerzas políticas que con alegría y certeza van diciendo a la ciudad que ya tienen alcalde.
LO QUE SIGUE
A un mes de las elecciones locales todos los partidos políticos y movimientos en el Valle del Cauca, ya decidieron sus apoyos a candidatos a la alcaldía de Cali y gobernación del departamento.
Entramos en un periodo en donde es común que candidatos debilitados declinen para sumarse al que consideran ganador. Hoy se espera que esta semana Diana Rojas se sume a Alejandro Eder y de pronto Wilson Ruiz haga lo propio. Pero que una candidata que va de tercera en las encuestas y otro de octavo se le sume al segundo no significa que sus aliados le vayan a sumar los votos suficientes para ganarle a Roberto Ortiz.
No es una acción de aritmética en donde una persona que lleva 18 puntos y adhiera a una con 10 y que esa operación política vaya a representar 28.
En los últimos días se puso en desarrollo una estrategia mediática que pretende que los electores identifiquen al “chonto” como el candidato del alcalde Ospina. No es fácil que el mensaje cale porque se trata de uno de los concejales que más denuncias hizo en contra de Ospina y que día a día lo llamó corrupto. Se supone que los ataques provienen de la campaña de Eder.
Por apuros de la inminencia del día electoral, por las decisiones de la política a Alejandro solo le queda debilitar la imagen de su adversario más peligroso pero hasta el momento no hay nada que lo liquide.
Y en lo que tiene que ver con propuestas Roberto Ortiz, les dio dos golpes demoledores a sus rivales y los dejó sin argumentos como fue el caso de la puesta en escena con su estrategia de seguridad que fue audaz y generó aplausos por parte de los caleños.
La semana pasada el “chonto “soltó piezas publicitarias y videos para oficializar su compromiso de construir nueve complejos viales para erradicar el problema de movilidad que se presenta en puntos claves de la ciudad. Los próximos días serán claves en lo que tiene que ver con la propensión de Diana Rojas, a dar golpes de opinión para aparecer en titulares de prensa y crear confusión.