La Dirección Administrativa de la Cámara de Representantes autorizó a inicios de año la remodelación del capitolio, con un costo de más de 35 mil millones de pesos. Entre las compras que tiene este contrato están muebles, televisores, cámaras de televisión, escritorios, cerraduras, baterías y reparaciones en oficinas del Congreso.
Entre los gastos destacan sillas ergonómicas para las oficinas de los 187 representantes de la Cámara, que tienen un costo de 7 millones de pesos, sumado a los 600 mil pesos que cuesta instalar cada una.
Dentro de sus oficinas también estrenarán escritorios de 6 millones de pesos y archivadores que ascienden a 7 millones, la instalación de estos muebles también tuvo un costo adicional de 600 mil pesos.
Aunque son 187 representantes, la dirección administrativa de la Cámara decidió comprar 253 unidades de cada mueble, debido a “un proceso de mejora continua, de renovación y actualización tecnológica”. En otras palabras, tenerlas en un depósito y para realizar cambios.
El contratista “Bolsa Mercantil” gastó solo en las sillas más de mil millones de pesos, que provienen de impuestos de los colombianos. Y aunque el contrato inicial era de 28 mil millones de pesos, tuvo una adición presupuestal de 8 mil millones en octubre, lo que elevó el monto a 35 mil millones de pesos.