La escalada de violencia en la región del Catatumbo ya deja más de 30 muertos, según la defensoría del Pueblo, y al menos 70 familias desplazadas de sus hogares. Ante esta situación, el Gobierno Petro se plantea declarar un Estado de Conmoción Interior.
Los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el frente 33 de las disidencias de las Farc de alias ‘Calarcá’ han escalado en los últimos días. Hechos que iniciaron tras la masacre de una familia de médicos, y su bebé de ocho meses en la vía Tibú-Cúcuta.
Según el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, “desde la época de los paramilitares no se vivía una situación de tal magnitud, con personas siendo sacadas de sus viviendas y asesinadas solo por su vinculación a un grupo u otro”.
Frente a esta situación, el presidente Petro llegó con su gabinete el viernes 17 de enero en la tarde a un Consejo de Seguridad que duró poco más de dos horas. Entre las opciones que planteó el presidente están el declarar un Estado de Conmoción Interior y decretar la emergencia social y económica. Ambas medidas le dan facultades extraordinarias al Ejecutivo.
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¿Qué pasaría en un Estado de Conmoción Interior?
La conmoción interior es un estado de emergencia que otorga al Gobierno facultades especiales para restablecer la normalidad y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Presidente de la República amparado en el artículo 213 de la Constitución Política de 1991.
El Estado de Conmoción Interior puede decretarse si se cumple los siguientes requisitos:
- Perturbación grave del orden público.
- Amenaza a la estabilidad institucional.
- Imposibilidad de controlar la situación con las herramientas ordinarias.
Con estos superpoderes, el Gobierno puede expedir decretos con fuerza de ley o suspender las garantías constitucionales como la libertad de reunión o la inviolabilidad del domicilio.
Esta excepción puede declararse en todo el país o en parte de él, como intentaría el gobierno decretar en la región del Catatumbo. No puede durar más de 90 días, y en caso de hacerlo requerirá un concepto favorable del Senado.
¿Cuándo fue la última vez que se declaró Estado de Conmoción interior?
El último presidente en utilizar esta figura fue Álvaro Uribe durante su segundo mandato en 2008. Se recurrió a esta figura por un paro judicial que amenazaba con la excarcelación masiva de delincuentes. El exmandatario argumentaba que la administración de justicia no estaba funcionando de manera normal y adecuada, lo cual atentaba contra la estabilidad institucional.
Sin embargo, la corte tumbó la declaratoria del estado de conmoción interior, entre otras cosas, por considerar que se trataba de la congestión judicial de la cual padece el país.
