La proyección preliminar del Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2025, presentada por el Departamento Nacional de Planeación (DNP), refleja una significativa reducción en la inversión regionalizada, afectando de manera destacada al Valle del Cauca. Este departamento sufrirá una disminución de $672.421 millones en su asignación, una de las más altas del país, según el análisis comparativo entre el presupuesto proyectado “Con Ley” y “Sin Ley”.
A nivel nacional, el presupuesto de inversión pasó de $82,464 billones a $70,466 billones, marcando una reducción de $11,997 billones. Este ajuste se deriva de la no aprobación de la reforma tributaria propuesta por el gobierno de Gustavo Petro, que buscaba garantizar mayores ingresos para financiar proyectos regionales.
Además del Valle del Cauca, otros departamentos afectados incluyen Antioquia, con un recorte de $564.772 millones; Cundinamarca, con $249.855 millones menos; y La Guajira, que enfrentará una disminución de $399.467 millones.
El impacto en el Valle del Cauca
La reducción para el Valle del Cauca representa un duro golpe para el financiamiento de proyectos esenciales en infraestructura, educación y desarrollo social. El departamento, que inicialmente proyectaba recibir $4,18 billones en 2025, verá su asignación reducida a $3,15 billones. Esta caída complica aún más la ejecución de programas necesarios para la población y la competitividad de la región.
A pesar de este escenario, el gobierno departamental ha reaccionado con una estrategia que incluye la aprobación de un presupuesto propio de $3,5 billones, financiado en parte mediante créditos autorizados por la Asamblea Departamental. Estos recursos estarán enfocados en obras de infraestructura vial, educativa y deportiva, con el objetivo de contrarrestar los efectos de la reducción de los recursos nacionales.
Es importante señalar que estas cifras, presentadas en el marco del debate sobre la Ley de Presupuesto General de la Nación, son preliminares y están sujetas a los decretos 111 de 1996 y 1082 de 2015, que regulan el manejo del presupuesto público en Colombia.
Estos recortes evidencian la urgencia de un acuerdo político que permita garantizar fuentes de financiamiento estables para las regiones. Líderes regionales han insistido en la necesidad de buscar alternativas para mitigar el impacto de esta disminución en la inversión, asegurando que se prioricen los proyectos estratégicos que beneficien directamente a la población.
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Mientras tanto, el Valle del Cauca enfrenta el desafío de hacer más con menos, apostando por la austeridad y la optimización de recursos para mantener su crecimiento económico y social en el próximo año.