A pocos días del inicio de la Feria de Tuluá, las autoridades locales y departamentales han reafirmado su compromiso con la realización del evento, pese a las recientes amenazas que circularon por redes sociales. La alerta se generó luego de que mensajes anónimos advirtieran un posible ataque contra la feria, señalando a la banda criminal La Inmaculada. Esta situación reactivó el temor entre los ciudadanos, especialmente porque en 2024 la feria fue cancelada tras una serie de hechos violentos, incluido el asesinato de dos concejales del municipio.
La gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, aseguró que la feria no se suspenderá y que se tomarán todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad. En un mensaje público, afirmó que “los violentos no tendrán espacio en nuestro territorio” y llamó a la ciudadanía a unirse y no dejarse intimidar. Según informó, ya solicitó al Ministerio de Defensa un refuerzo del pie de fuerza en Tuluá.
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Medidas de seguridad reforzadas y respaldo institucional
Tanto el gobierno departamental como la Alcaldía de Tuluá activaron un plan conjunto para blindar la feria. Las autoridades intensificaron los patrullajes, instalaron puestos de control y prepararon operativos especiales que se desplegarán durante cada jornada del evento. La gobernadora Toro indicó que el acompañamiento de las Fuerzas Militares y la Policía será clave para brindar tranquilidad a quienes asistan. También anunció que se mantendrá la vigilancia sobre posibles riesgos, sin bajar la guardia en ningún momento.
El alcalde Gustavo Vélez respaldó la decisión de seguir adelante con la feria y denunció que las amenazas también van dirigidas contra él, su familia y varios funcionarios. A pesar de ello, reiteró que se cuenta con el respaldo del Gobierno Nacional y se están tomando precauciones para evitar cualquier acto de violencia. “La Feria no se suspende, la ciudad no se rinde”, afirmó, destacando el impacto positivo del evento en la economía y la cultura del municipio. La presencia de más de mil artistas, expositores y visitantes justifica, según el mandatario, el esfuerzo institucional por mantener esta tradición.
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Una feria para disfrutar en familia y fortalecer la cultura
La edición número 67 de la Feria de Tuluá, programada del 19 al 23 de junio, incluirá una variada agenda de actividades culturales, musicales y gastronómicas. La cabalgata, uno de los eventos más esperados, se realizará el sábado 14 de junio como antesala al festival. Además, el Coliseo de Ferias será escenario de exposiciones ganaderas, competencias ecuestres y muestras de animales de gran valor para el sector agropecuario.
Los asistentes también podrán disfrutar de exhibiciones de plantas ornamentales, concursos de artesanías, degustaciones de dulces típicos como el metato y conciertos con artistas de talla nacional. La feria busca no solo entretener, sino también impulsar la economía local, dinamizar el comercio y fortalecer la identidad cultural del centro del Valle. Con el respaldo institucional, la comunidad se prepara para demostrar que la alegría y la resiliencia pueden imponerse sobre el miedo.