Con el firme propósito de garantizar la seguridad y el bienestar de los asistentes a la tradicional Feria de Tuluá en su edición número 67, la Policía Nacional, en articulación con el Ejército, ha desplegado un extenso y sofisticado operativo que cuenta con la presencia de más de 1.000 uniformados. El dispositivo, que se mantendrá activo durante toda la celebración, busca asegurar el desarrollo pacífico de las actividades culturales, comerciales y recreativas programadas entre el 19 y el 23 de junio.
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El esquema de seguridad contempla la participación de grupos operativos de élite como el GOES, GAULA, Carabineros, el Grupo Antiterrorismo COPES y agentes encubiertos de la SIJIN y SIPOL, quienes estarán estratégicamente distribuidos por el municipio, incluyendo zonas rurales. La Gran Caravana de la Seguridad recorrerá las principales vías, reforzando la presencia institucional y brindando mayor tranquilidad a los habitantes y turistas.
Patrullajes en helicóptero, drones, unidades especializadas para reforzar seguridad en Tuluá
El componente tecnológico juega un papel clave en esta estrategia: patrullajes aéreos con el helicóptero Halcón, monitoreo en tiempo real mediante drones y el apoyo de unidades especializadas en inteligencia táctica forman parte de las acciones para prevenir cualquier alteración del orden público.
“Estamos comprometidos con unas ferias en paz, con tecnología, estrategia y presencia efectiva en las calles. Nuestra prioridad es la seguridad de todos los ciudadanos”, aseguró la coronel Sandra Liliana Rodríguez, comandante de la Policía Valle.
El despliegue de seguridad responde no solo al carácter masivo de los eventos como cabalgatas, conciertos y desfiles, sino también a los recientes hechos de violencia ocurridos en el municipio. Las autoridades hacen un llamado al disfrute responsable y a reportar cualquier situación sospechosa a las líneas de emergencia dispuestas.
Por su parte, el alcalde Gustavo Vélez invitó a los tulueños y visitantes a vivir esta feria con alegría y confianza, destacando el compromiso de la Policía y el Ejército para salvaguardar tanto el casco urbano como la zona rural. Además, reiteró el llamado al respeto por la vida animal, recordando la prohibición de menores en la cabalgata y la vigilancia especial para evitar el maltrato de equinos, tras incidentes registrados en años anteriores.
Con este plan integral, Tuluá espera celebrar una feria vibrante y segura, símbolo de la cultura y la tradición del centro del Valle del Cauca.
