La Secretaría de Salud del Valle del Cauca emitió una alerta sanitaria ante la aparición de varios casos confirmados de tosferina en el departamento, una enfermedad infecciosa que está afectando con mayor severidad a menores de cinco años. Palmira, Buga y Cali son los municipios donde se concentran los brotes, según informó María Cristina Lesmes, titular de la cartera de salud regional.
Hasta el momento se han identificado doce posibles casos, de los cuales seis fueron descartados, pero los otros seis han presentado complicaciones significativas. En el municipio de Buga, en particular, se confirmó un pequeño brote con al menos cuatro contagios cercanos, todos en niños de corta edad.
“Esta enfermedad afecta sobre todo a los bebés cuando sus madres no han sido vacunadas durante el embarazo. Lo más preocupante es que su progresión puede ser grave si no se detecta a tiempo”, advirtió Lesmes. La funcionaria también describió la evolución de los síntomas, que inician como un resfriado común pero que luego derivan en una tos severa y persistente, acompañada de vómitos y dificultad para respirar, lo cual puede comprometer el suministro de oxígeno al cerebro.
¿Qué es la tosferina?
La tosferina, también conocida como tos convulsiva, es causada por la bacteria Bordetella pertussis y se transmite fácilmente por el aire a través de la tos o el estornudo de personas infectadas. Aunque puede afectar a personas de todas las edades, los bebés no inmunizados o parcialmente vacunados corren el mayor riesgo de desarrollar complicaciones graves, como neumonía, daño cerebral o incluso la muerte.
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El tratamiento temprano con antibióticos puede ayudar a reducir los síntomas y evitar la propagación, pero en muchos casos el diagnóstico se realiza en fases avanzadas. Por esta razón, las autoridades insisten en la importancia de completar el esquema de vacunación infantil y de que las mujeres embarazadas se vacunen, ya que esta medida ofrece protección al recién nacido.
Campañas de sensibilización y prevención
Ante el brote, se ha intensificado el monitoreo epidemiológico en los municipios afectados, así como campañas de sensibilización y prevención. Además, se recomendó que los niños no vacunados o con síntomas respiratorios eviten asistir a entornos escolares o comunitarios, al menos durante 14 días posteriores al último contacto con un caso confirmado.
Las autoridades reiteraron que, ante señales de alarma como tos persistente, vómitos al toser, pausas en la respiración o coloración azulada en la piel, se debe acudir de inmediato a un centro médico. “El diagnóstico y el tratamiento oportuno pueden salvar vidas”, enfatizó la secretaria Lesmes.
