Las autoridades instalaron un bloque de búsqueda con 690 uniformados tras los atentados ocurridos el pasado 10 de junio en Cali, Jamundí y varios municipios del Cauca. Este grupo especializado, fue creado con el objetivo de capturar a los responsables de los ataques y prevenir nuevos hechos violentos.
Este equipo ha desplegado una estrategia de blindaje en la ciudad y zonas rurales mediante la instalación de 14 corredores seguros puntos de control. Además, el bloque se apoya en cápsulas operativas que integran inteligencia, investigación criminal y unidades contra el secuestro y la extorsión.
Le puede interesar: Rosa Villavicencio es la nueva canciller de Colombia
Capturas, incautaciones y ofensiva contra disidencias
En tan solo tres semanas de operación, el bloque de búsqueda de Cali ha capturado a 15 personas mediante 10 operativos dirigidos por la Fuerza Pública. Las autoridades incautaron tres armas de fuego, una granada, dos toneladas de drogas ilícitas, 30 celulares y mercancía de contrabando avaluada en 14.000 millones de pesos. Estos resultados consolidan el avance de la ofensiva contra estructuras criminales de alto impacto.
En respuesta a los atentados del 10 de junio, el grupo ha realizado cuatro operaciones que derivaron en nueve capturas de presuntos integrantes de redes de apoyo del Frente Jaime Martínez de las disidencias de las Farc. Estas personas estarían involucradas en la planeación y ejecución de ataques con explosivos en varios sectores del suroccidente colombiano.
Lea también: Uribismo quiere recomponer campaña tras atentado a Miguel Uribe
Golpes directos a estructuras urbanas del Frente Jaime Martínez
Uno de los operativos más recientes tuvo lugar el sábado anterior, cuando las autoridades capturaron a tres personas señaladas de participar en atentados terroristas. Las autoridades capturaron a alias Jefferson, alias Cholo y alias Yang; detuvieron a dos por orden judicial y a uno en flagrancia durante allanamientos en los barrios La Unión y Ciudad Córdoba, en Cali.
Alias Jefferson, según las investigaciones, actuaba como explosivista y enlace entre la estructura armada del Frente Jaime Martínez y la ciudad de Cali. Su rol consistía en facilitar materiales y coordinar la entrega de explosivos improvisados adaptados a motos, bicicletas y paquetes para ejecutar atentados.