El gobierno de Colombia anunció que la reforma a la salud está prácticamente acordada tras una reunión con diferentes partidos políticos. Según el ministro de Salud, Alfonso Prada, la reforma busca mejorar la calidad del servicio y garantizar el acceso a los servicios de salud para toda la población, especialmente para los más vulnerables.
El acuerdo incluiría la creación de una entidad independiente que administre los recursos de la salud, eliminando así el sistema de compensación que actualmente existe. También se implementaría un modelo de atención primaria en salud que estaría basado en la prevención, promoción y atención integral de la salud.
Además, el gobierno asegura que la reforma incluirá medidas para fortalecer la atención a las enfermedades crónicas y la salud mental, mejorar la atención en zonas rurales y promover la medicina alternativa y complementaria.
Sin embargo, algunos sectores de la sociedad civil y partidos de oposición expresaron su preocupación por la falta de participación ciudadana en la definición de la reforma y la posible privatización del sistema de salud. Según estas voces críticas, la reforma estaría diseñada para beneficiar a los intereses de los grandes conglomerados de la salud en detrimento de la población más vulnerable.
El ministro de Salud respondió a estas críticas señalando que la reforma no busca privatizar la salud, sino que busca mejorar la eficiencia y la transparencia en la gestión de los recursos para garantizar un servicio de calidad y accesible para todos los ciudadanos.
En conclusión, aunque el gobierno afirma que la reforma a la salud está casi acordada, aún existen preocupaciones y críticas por parte de algunos sectores de la sociedad civil y partidos de oposición que señalan la necesidad de una mayor participación ciudadana y de garantías para que la reforma realmente beneficie a la población más vulnerable.